ALEMANIA.- A pesar de los esfuerzos del gobierno en desasociar a los inmigrantes islámicos de la ola de violencia en Alemania, algunos periódicos están perforando el bloqueo y reportando que al menos han ocurrido 200 ataques a iglesias en la región de Baviera en los últimos dos años. El número es asustadizo, especialmente porque el país junto con las iglesias conmemoró recientemente el aniversario de 500 años de la Reforma Protestante, reafirmando cómo el cristianismo ayudó a moldear el país.
The European informa que los daños son muy variados, que los daños son variados, yendo de cruces arrancadas de las cúpulas – con hachas o sierras – a imágenes de Jesús y de santos siendo destruidas.
Hay relatos de invasión de los templos, tanto evangélicos y católicos, en las regiones de Längental, Sylvensteinstausee y Tirol. En algunos lugares cruces expuestos en lugares públicos, típicos de la región, fueron derribados. En algunos casos, las imágenes de Jesús fueron desfiguradas.
En la parroquia de St. Anton, en Passau, el padre Manuel Schlög lamenta que hubo una invasión durante la noche. Todo lo que había en el altar fue arrojado al suelo, piezas de oro robadas y los vándalos intentaron prenderle fuego, pero afortunadamente no tuvieron éxito.
Más que el daño, que costará algunas decenas de miles de euros, el líder de la iglesia lamenta: “Fue un ataque a nuestra fe”.
La policía no arrestó a nadie, pues en esta región rural de Alemania no es común que los templos tengan sistemas de seguridad. Según la prensa, son miles de inmigrantes musulmanes que llegaron a la región que están tratando de sembrar el miedo en la población.
Un informe reciente del periódico Express asegura que los ataques contra lugares de culto cristianos son una orden del Estado Islámico por parte de sus seguidores.
