Mat 11:28-30 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
Mat 11:28-30 contiene una descripción hermosa del propósito y ritmo de paso del caminar llenos del Espíritu. Jesús te invita a una caminata relajante con El, así como los dos bueyes caminan juntos bajo el mismo yugo. ¿Cómo puede ser un yugo relajante? Podrías preguntar. Porque el yugo de Jesús es un yugo fácil. Como el buey líder, Jesús camina a un ritmo constante. Si te unes a Él. Tu carga será fácil. Pero si tomas una actitud pasiva en la relación, serás arrastrado dolorosamente por el yugo porque Jesús sigue caminando. O si tratas de correr o de ir en otra dirección, el yugo rosará tu cuello y tu vida será incómoda. La clave para una relación de yugo relajante con Jesús, es aprender de Él y abrirte a Su bondad y humildad.
La idea de caminar en el Espíritu en unión con Jesús también nos ayuda a entender nuestro servicio a Dios. ¿Cuánto podrías hacer sin que Jesús estuviera avanzando en su lado del yugo? Nada. Y ¿cuánto se podría lograr sin ti del otro lado del yugo? Nada. Un yugo puede funcionar sólo si los dos están jalando juntos.
Pablo dijo: “Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios” (1Cor 3:6) Tú y yo tenemos el privilegio de plantar y regar, pero si Dios no está en ello, nada crecerá. Sin embargo, si no plantamos ni regamos, nada crecerá. Dios ha escogido trabajar a través de la iglesia en colaboración contigo para hacer Su obra en el mundo hoy. Él es el líder guía. Aprendamos de Él.
Por Neil Anderson
ORACIÓN
Querido Jesús, quiero que seas mi compañero de yugo. No dejes que me adelante o que me atrase. Quiero caminar paso a paso contigo.
