CHINA.- Dando continuidad al proyecto del Partido Comunista de China, que apoya al régimen de Corea del Norte, tres provincias chinas expulsaron a casi 1.000 misioneros y pastores. La gran mayoría son cristianos surcoreanos que ayudaban a los desertores norcoreanos.
El gobierno comunista del país continúa con su represión contra actividades religiosas, según un informe publicado el lunes (6/11). Desde finales del año pasado, las provincias de Liaoning, Jilin y Heilongjiang, en el noreste de China han identificado y deportado pastores además de tratar de cerrar sus iglesias, de acuerdo con el diario británico expreso .
En Changchun, capital de la provincia de Jilin, todas las iglesias encabezadas por surcoreanos se cerraron de una vez. Esta expulsión de líderes cristianos extranjeros, sobre todo surcoreanos forma parte del plan chino de implementar nuevos reglamentos sobre asuntos religiosos. El objetivo declarado es “erradicar el extremismo” hasta el 1 de febrero de 2018.
Se prevén pesadas multas para quienes organizan “actividades religiosas no aprobadas” (US $ 45.200) y para los que ofrecieron un lugar para “eventos religiosos ilegales” (30.100).
Bob Fu, fundador y presidente de la Misión de China Aid, una organización que lucha contra la persecución de los cristianos en China, dijo a Christian Post que “la cumbre del gobierno chino está cada vez más preocupados por el rápido crecimiento de la fe cristiana, su presencia pública y su influencia social. Es un miedo político del Partido Comunista, ya que el número de cristianos en el país ha superado con creces los miembros del partido”.
Bajo el liderazgo del presidente Xi Jinping, que está en el poder desde 2013, se multiplicaron las medidas contrarias a los cristianos. Desde la revolución comunista de 1949 fueron invadidos un número récord de iglesias “subterráneas”, cientos de pastores fueron detenidos, templos, se derribaron y se multiplicaron las denuncias de tortura y la violencia contra los cristianos en todo el país. Traducido en cifras, se estima que la persecución religiosa en China creció un 700% en la última década .
Según informó el mes pasado, el Partido Comunista pretende mantener a Xi en el poder hasta 2022, cuando termina su segundo mandato.