NIGERIA. – La Iglesia Reigners Bible Internacional, en la ciudad de Uyo, capital del estado de Akwa Ibom, al sur de Nigeria, vivió una tragedia el sábado. El techo del templo se derrumbó, dejando 160 muertos. El sitio estaba aún en construcción y su apertura se llevaría a cabo la próxima semana.
De acuerdo con el testimonio de los fieles, incluso no estando lista, la iglesia se llenó en el culto, cuando se produjo la ordenación de un obispo de la denominación. Las vigas de metal cayeron y el techo de hierro cedió.
El gobernador Udom Emmanuel asistió a la ceremonia religiosa, pero no fue herido. Las autoridades anunciaron que investigarán el caso, para cerciorarse si cumplieron con todas las normas de construcción.
Las grúas están en el sitio tratando de eliminar todos los escombros y comprobar si el número de víctimas es mayor. Con el retraso de ambulancias ayer, muchas familias tomaron los cadáveres para hacerles sus funerales en casa, dijo Peters Edikan, líder de jóvenes de la iglesia.
Los periodistas que se desplazaron al lugar reclaman de que los trabajadores de la iglesia trataron de impedir la tragedia, prohibiéndoles fotografiar y no dar acceso a las ruinas del templo.
Los colapsos de construcciones en Nigeria son relativamente comunes, en gran parte debido a la cultura local de pagar sobornos por la liberación de las obras. Esta es la tragedia más grande de este tipo en el país. En 2014, un edificio de varios pisos de la Iglesia Sinagoga de Todas las Naciones en Lagos se derrumbó, matando a 116 personas. En ese momento, se demostró que hubo graves defectos estructurales.