El pequeño Patrick, el niño pastor de 11 años que le ha dado la vuelta al mundo, está captando a atención de miles de cristianos por su forma asombrosa de hablar de Jesús a su corta edad.
Patrick, es un niño que lleva la llama del Evangelio encendida en su corazón,es un pequeño apasionado por Dios que comparte el amor de Jesús con los perdidos, esto lo ha llevado a convertirse en el pequeño y gran pastor de la Iglesia Watoto ( que significa niños en idioma Swahili) en Uganda, de la cual también maneja un ministerio para niños huérfanos.
Su ministerio único también comprende el apoyo evangelístico hacia los Ministerios de Cuidado Infantil de Watoto, tres hogares para bebés, servicios de trabajo social, clínicas médicas, pastoral y discipulado, tres escuelas primarias, una escuela secundaria, una escuela vocacional, entre otras obras sociales que trabajan de la mano con otros grupos cristianos.
El negrito de fuego, se dio a conocer en la región donde vive por la forma en que se relaciona con otros niños.
Desde muy pequeño, demostró su disposición para hablar de Jesús a sus conocidos, lo cual le llevó a obtener el título del “pastor” de Patrick.
“Estamos muy agradecidos de que haya sido recibido en una familia amorosa en Watoto”, dijo la Iglesia. “Con solo once años, Patrick ya comparte su fe y amor por Jesús con todos los que conoce”.
Según informa UG Cristhian News, a pesar de su corta edad y las dificultades que enfrentó Patrick, a una edad temprana pudo superar las barreras y poner en su corazón el deseo de servir al Reino de Dios.
Cuando se le preguntó por qué lo llamaron pastor, su respuesta es objetiva: “Porque eso es lo que quiero ser cuando sea mayor. Quiero compartir el amor de Jesús con los demás”, dijo.
“Hoy tengo 11 años y sé que mi identidad está en Jesús. No importa cómo sea el mundo, sabemos que Dios nos ama, tiene un plan para nuestras vidas y ella nunca nos dejará ”, dice Patrick, seguro de su llamado pastoral.
El jovencito inspira la fe de sus demás compañeros, suele siempre decir que Dios permanece fiel en su amor y misericordia, a pesar de los errores de los seres humanos, sus mensajes cautivan y llenan porque viene desde el corazón de Dios hacia su pureza.
Por algo el mismo Jesús dijo que no impidamos dejar a los niños venir hacia él, porque de ellos es el reino de los cielos; para este tiempo el prometió también levantar nuevas generaciones, profetas, gente que verían visiones, soñarían sueños y prepararían el terreno para el retorno de la segunda venida del Salvador.