En Brasil, una iglesia evangélica de Sara Nossa Terra en el Distrito Federal fue allanado hace una semana por un grupo de vándalos blasfemos que ingresaron al sitio para destruir todo a su paso y a la vez orinar y profanar el altar.
El caso quedó registrado en la ciudad de Santa María (DF) y fueron los responsables de la iglesia los que grabaron un video donde se muestra el daño.
Los vándalos dañaron instrumentos musicales, sistemas de sonido y otros objetos, así mismo rasgaron y arrojaron copias de la Santa Biblia, las dejaron tiradas y partidas regadas por el suelo.
Los autores de este hecho también dejaron una botella con los restos de una bebida alcohólica, además orinaron sobre el altar y derribaron una cruz simbólica que estaba en la pared del templo.
Según la información del medio Gospel Prime, la invasión la descubrió un miembro de la congregación. El llegó al sitio el viernes por la mañana y descubrió que el sitio estaba completamente destrozado.
El episodio es calificado como un caso de persecución religiosa, A pesar de que los vándalos no robaron nada, todo parece apuntar a que son acciones de represalias, rechazo o provocación.
La Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Legislativa del Distrito Federal (CLDF) repudió el episodio de la iglesia y anunció que seguirá el caso de cerca para dar con los autores.
El presidente de la Comisión, Representante de Distrito Fabio Félix (PSOL), también calificó el ataque como una manifestación de intolerancia religiosa: “No es tolerable que entidades religiosas de cualquier matriz sean blanco de intolerancia y violencia.
El caso sigue en manos de las autoridades, está en la33 estación de policía en Santa María. Inicialmente es calificado como robo y daño a la propiedad. Pero no se han encontrado sospechosos del crimen.