Mateo 11:6 Bienaventurado el que no tropieza por causa de mí.
En la vida pasamos por momentos buenos, y por otros no tan buenos. Es así para todos. La diferencia está en cómo enfrentamos y aprovechamos esos momentos. Algunas personas son optimistas, y otras son pesimistas. Sabemos que nuestro futuro está en las manos de Dios y que por medio de la fe en Cristo él nos reservó un futuro perfecto.
Si haces un balance de tu vida, verás que te han sucedido muchas cosas buenas, pero que no siempre le agradeciste a Dios por ellas. Comienza el día de hoy como una bendición. ¡Aprovéchalo! Vive este día con alegría. ¿De dónde sacar motivos para alegrarse? La respuesta es simple: del perdón de tus pecados que Dios te dio por medio de Cristo, y de la certeza de que nuestro Dios te ama.
ORACIÓN: Generoso Dios, gracias por las muchas bendiciones que me das. Ayúdame a tener una visión más optimista de la vida, y a reconocer todas las bendiciones y alegrías que me das. Amén.