1 Tim 6:6 pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento.
El concepto de felicidad del mundo es obtener lo que queremos. Todo el consumismo está basado en esta idea. Para ser verdaderamente felices necesitamos un coche más vistoso, una loción sexy o cualquier número de aparatos que son mejores, más rápidos o más fácil de usar de los que ya tenemos. Vemos los comerciales, leemos los anuncios y perseguimos la última moda, los lujos y lo moderno. Compramos la mentira de que no seremos verdaderamente felices hasta que consigamos lo que queremos.
El concepto de Dios de la felicidad se resume en el simple proverbio: “feliz es el hombre que quiere lo que tiene” Mientras te enfoques en lo que no tienes, serás infeliz, pero cuando comiences a apreciar lo que ya tienes comenzarás a experimentar el gozo de la vida. Pablo le escribió a Timoteo: “es cierto que con la verdadera religión se obtienen grandes ganancias, pero sólo si uno está satisfecho con lo que tiene. Porque nada trajimos a este mundo y nada podemos llevarnos. Así que, tenemos ropa y comida, contentémonos con eso” (1 Tim 6:6-8 NVI)
En realidad ya tienes todo lo que necesitas para vivir una vida alegre. Tienes a Cristo. Tienes vida eterna. Eres amado por tu Padre Celestial quien ha prometido suplir todas tus necesidades. No es de extrañar que la Biblia nos mande repetidamente que seamos agradecidos (1 Tes 5:18) si realmente quieres ser feliz, aprende a ser agradecido por lo que tienes y no codicies lo que no tienes.
Por Neil Anderson
ORACIÓN
Padre, hoy quiero buscar primeramente Tu reino y Tu justicia, sabiendo que Tú proveerás a mi vida lo que necesito, en el nombre de Jesús, amén.
