Filip 1:21 Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.
El verdadero contentamiento se encuentra sólo en Cristo.
Nunca ha habido una sociedad en la historia del mundo que ha tenido tantas comodidades como las tienen los estadounidenses. Estamos viviendo en la opulencia inaudita para la historia del mundo. La filosofía clave detrás de todo esto es esta: “sólo al acumular suficientes bienes para satisfacer tu estilo de vida particular puedes verdaderamente ser feliz”
Tristemente los cristianos han comprado esta filosofía. Ahora, no hay nada intrínsecamente malo con las comodidades, pero está mal pensar que encontrarás la verdadera felicidad en ellas. Si Dios decide darte posesiones materiales, es por Su buena voluntad. Pero si haces de esas posesiones el amor de tu vida, estás siendo engañado con respecto al verdadero contentamiento.
En Filipenses 4:11-12, el apóstol Pablo dice: “No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad” Él estaba diciendo: “tengo un contentamiento que no está relacionado en lo absoluto con las posesiones” ¿Dónde encontró Pablo ese contentamiento? En Filipenses 1:21 él dice: “para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia” Lo encontró en Cristo, no en las posesiones materiales. El profesor Howard Vos dijo de Pablo: “Cristo lo es todo para él, vive solamente para servir a Cristo, no tiene concepto de la vida aparte de Cristo… los objetivos de Cristo, la orientación de Cristo a la vida y la sociedad y misión, son suyos” Si quieres ser como Pablo y tener un verdadero contentamiento, haz de Cristo el amor de tu vida, no las cosas materiales.
Por John MacArthur
