Gálatas 3:28 Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús.
Algunas personas creen que todas las religiones son lo mismo. Pero no es así.
La CNN publicó una historia sobre jovencitas de 16 años en Afganistán que estaban recuperándose en un hospital luego de haber quedado inconscientes mientras estaban en la escuela.
Los informes decían que habían sido envenenadas, lo que hace que éste no haya sido un incidente aislado. Las 88 estudiantes y profesores ya han sido envenenados en oportunidades anteriores. El culpable en todos estos casos parece ser el Talibán.
Para quienes no lo saben, el Talibán es una organización islámica fundamentalista que cree, entre otras cosas, que las mujeres no deben recibir educación. Por lo tanto, hacen cosas como estas para desalentar a las jóvenes de que sigan estudiando.
Hay quienes dicen que San Pablo era bastante nacionalista. No lo sé. Pero sí sé que, bajo la dirección del Espíritu Santo, Pablo escribió que ya no hay más diferencias entre el hombre y la mujer. Al igual que todos los líderes cristianos que son fieles a las Escrituras, Pablo creía que todos somos uno en Cristo Jesús.
Todos somos pecadores, y todos somos almas por las que el Salvador murió. Gracias al sacrificio de Jesús, ahora todos somos capaces de ser llamados y de recibir la fe por el Espíritu Santo. No hay diferencia alguna.
Y esto es algo que voy a compartir con mi amigo... y que todos necesitamos compartir con nuestros hijos y conocidos.
Todas las personas necesitan saber que Jesús las ama. Tanto los ama, que vino a esto mundo a entregarse a sí mismo para que ellas puedan ser salvas.
ORACIÓN: Padre celestial, ya sea que seamos hombre o mujer, por nosotros mismos no valemos nada. Pero, aún así, tú enviaste a tu Hijo para buscar y salvar lo que se había perdido. Te pedimos que protejas a las mujeres en Afganistán, y que les hagas ver que Jesús también murió por ellas. En su nombre. Amén.