Gen 3:4-5 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.
Adán y Eva fueron los primeros en ser entados por la idea de que podrían ser como Dios, esa es la esencia de la cosmovisión egocéntrica que Satanás promueve. Millones han sido seducidos por Satanás al creer que son Dios. El movimiento de la Nueva Era promueve esta mentira en una escala internacional.
Sin embargo, el relato bíblico de la creación establece que sólo Dios el Creador es el verdadero Dios. Adán y sus descendientes no son dioses, somos seres creados que no pueden existir apartados de Dios. La idea diabólica de que el hombre es su propio dios es el principal eslabón de la cadena espiritual de esclavitud al reino de las tinieblas.
El problema con el intento del hombre a ser su propio dios es que nunca fue diseñado para ocupar ese lugar. Carece de los atributos necesarios para determinar su propio destino. Aún el espiritualmente vivo, sin pecado, Adán, en el Jardín del Edén, antes de la caída, no estaba equipado para ser su propio dios. Contrario a lo que nos dicen los de la Nueva Era, el potencial de ser un dios, nunca ha estado en ti, no está ahora, ni lo estará.
Ser Dios sólo lo puede hacer Dios. Si deseas vivir en la libertad de la esclavitud del mundo, la carne y el diablo, este eslabón primario en la cadena debe ser roto. La cosmovisión egocéntrica que Satanás y sus emisarios están promoviendo debe ser reemplazada por la perspectiva que Jesús introdujo a Sus discípulos cuando dijo en Mat 16: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará. (V 24-25)
Por Neil Anderson
ORACIÓN
Padre, perdóname por las ocasiones cuando he usurpado Tu lugar en mi vida. Tú eres mi Señor y mi Dios.