WeChat es la app más usada en China, con más de 1.2 billones de usuarios al mes. Lo que la hace tan popular es que combina características de Facebook, YouTube, Instagram, FaceTime, e incluso funciones de las industrias bancaria e inmobiliaria.
El hecho de que las autoridades Chinas la controlan y censuran no impide que la población, incluyendo muchos cristianos, la usen a diario.
Taylor nos dice que en China “los cristianos usan WeChat todo el tiempo para nutrirse espiritualmente.” Las iglesias en hogares y las iglesias locales tienen grupos de WeChat, y también existen grupos para facilitar la oración en todo el país.
“En muchos sentidos, el hecho de que las iglesias chinas y sus grupos estén tan bien conectados a través de las redes sociales deja a los cristianos en Occidente bastante mal,” observa Taylor, añadiendo que “gracias a este nivel de conectividad, el cuidado, la comunicación y la oración son más frecuentes. Y cuando alguien se muda a otra parte del país, existe la posibilidad de compartir inmediatamente con él un contacto y conectarlo con una iglesia.”
¿No les preocupa a los cristianos que su privacidad sea vulnerada? Sí, dice Taylor, a algunos les preocupa. “[Pero] incluso aunque están preocupados, forman parte de la sociedad, y tienen que avanzar con ella.” En cuanto a los líderes cristianos, si bien puede que sean precavidos a la hora de compartir contenido relacionado con la iglesia en WeChat, sí que usan la app personalmente.
*Noticia extraída de Puertasabiertas.org