Según distintos medios Católicos el Vaticano está promoviendo la “Reunión de las Religiones Mundiales” a partir de la reapertura del Memorial de Moisés.
El Cardenal Sandri, prefecto de la Congregación de las Iglesias Orientales, ha presidido la ceremonia de inauguración del Memorial de Moisés en el Monte Nebo (Jordania). Este lugar ha sido desde hace siglos punto de encuentro para las tres grandes religiones monoteístas: cristianismo, judaísmo e islam.
Durante la inauguración, Sandri destacó la oportunidad que brinda este evento histórico para superar las actuales divisiones entre las comunidades orientales y las personas de las otras religiones monoteístas, que encuentran en este lugar sagrado un espacio de diálogo y encuentro.
También, ha expresado su deseo de paz para los pueblos de Jordania, de Siria e Iraq precisamente en el lugar sagrado donde según la Biblia, Moisés recibió los Diez Mandamientos.
En la homilía, el enviado especial del Papa recordó “la generación más joven de este querido Oriente Medio”, esperando que puedan ser “acompañados en el umbral de una vida de paz en sus países, en la coexistencia pacífica entre las religiones y las culturas en una competencia mutua por la caridad y por la construcción del bien común, y no volver a la violencia”.
Recordando el valor de la libertad religiosa, el cardenal añadió: “Si como Moisés extendemos nuestra mirada a toda la tierra circundante, somos conscientes de las divisiones y las pruebas en contra; conflictos que desde hace décadas enfrentan a la gente de un pueblo contra otro; el grito de los que huyen de la guerra y la persecución en Siria e Irak, y encuentran refugio en la tierra jordana”.
Acusando la “sordera” de los que “tienen en sus manos el destino de los pueblos y naciones, y prefieren preservar los mercados y las ganancias, en lugar de salvar las vidas inocentes de las mujeres y los niños”, espera que “este santuario” reabierto en el “Año de la Misericordia, siga siendo un lugar donde los peregrinos” sean “educados” en una “experiencia” de paz y convivencia.
Por último, el cardenal Sandri dio las gracias al Rey de Jordania por su hospitalidad y el esfuerzo que ha hecho siempre en defensa de la convivencia pacífica entre las religiones, así como por el gran trabajo de acogida de refugiados de Palestina, Siria e Irak.
En conclusión, instó a la comunidad internacional a hacer más para garantizar la paz y la justicia entre los pueblos e hizo un llamamiento “para el camino ecuménico de las iglesias: en Oriente “se consumaron los cismas”, en Oriente, donde hoy se mezcla la sangre de los cristianos de todas las denominaciones”.
Fuente: Asia News