Puertas Abiertas informa sobre un nuevo caso de persecución en China, se trata del dueño de la librería Zhang Xiaomi quien fue sentenciado a siete años de cárcel y deberá pagar 30 mil dólares.
El librero fue sentenciado en septiembre del año pasado por su manejo de “Xiaomi Bookstore”, quien vendía libros cristianos obtenidos en el extranjero.
Una fuente reveló a Puertas Abiertas: “Esta no es la primera vez que un vendedor de libros religiosos recibe una sentencia de cárcel. Sin embargo, es extraño ver una pena de siete años y una multa tan alta”.
Además, la fuente dijo que la literatura cristiana es controlada en China y que las personas acceden a internet para conseguir los libros y evitar restricciones.
“Uno de los problemas con la importación de libros, es que no tienen el número de identificación ISBN que emite China. Por tal motivo, son ilegales, convirtiéndose así en el objetivo de las autoridades”, explicó la fuente.
Puertas Abiertas describe que existen pruebas que demuestran que las autoridades Chinas buscaron los recibos de envío de los libros que vendió “Xiaomi Bookstore” para acceder a los compradores y pedirles que devolvieran el material.
En China existen censuras en las programaciones Online. La plataforma Renrenjian tuvo que suspender un programa de transmisión cristiano y publicar otro contenido.
La censura de esta plataforma ocurrió ya que recibieron la notificación de que el programa de transmisión “iba en contra de su política”.
Según China Christian Daily varias transmisiones dedicadas a mostrar la palabra han tenido que ser eliminadas de la plataforma por razones de censura.
