El Estado Islámico ejecutó a un cristiano copto ortodoxo egipcio, matándolo de un balazo en la cabeza en un relanzamiento filmado y difundido en las redes sociales del grupo yihadista y compartido por múltiples usuarios y plataformas.
La víctima, ya considerada un “nuevo mártir” por los ortodoxos del país, es un reconocido intelectual y empresario de 62 años, Nabil Habashi Khadim, secuestrado el 8 de noviembre en la ciudad de Bir Al-Abd, en el norte del Sinaí, asesinado mientras estaba arrodillado en el suelo.
Fuentes locales informan que el hombre contribuyó a la construcción del único lugar de culto cristiano en la ciudad. Esta es también una de las razones que llevó al comando yihadista a secuestrarlo en los últimos meses.
En un video, uno de los verdugos perteneciente a la célula local de Daesh (árabe para Estado Islámico), acusa explícitamente al hombre de haber contribuido, incluso financieramente, a la construcción de la iglesia justo antes de apretar el gatillo y ejecutarlo.
El grupo yihadista también acusa a la Iglesia de “colaboración” con el ejército egipcio, la policía y los servicios secretos. Otros relacionaron el asesinato del cristiano con las próximas vacaciones de Pascua, que caerán el 2 de mayo para los ortodoxos.
Los testigos dicen que Nabil Habashi Khadim, el último de una “larga línea de mártires del norte de Sinaí”, era un apreciado joyero en la ciudad de Bir Al-Abd. Su familia es considerada una de las más antiguas de la comunidad copta de la región, muy activa en el comercio del oro, además de propietaria de una tienda de ropa y reventa de teléfonos móviles.
El 8 de noviembre, un grupo de hombres armados pero encubiertos secuestró a Nabil en la calle frente a su casa y huyó sin ser intervenido. En todos estos meses, los registros policiales y las súplicas de la familia por su liberación fueron en vano.
Su muerte causó dolor y emoción en la comunidad copta egipcia, cuyo líder, Tawadros II, emitió una nota de condena y pidió oraciones por el hombre “secuestrado por elementos takfiri en el norte del Sinaí hace cinco meses y luego martirizado”.
La Iglesia,”llora por un hijo y un siervo fiel” que ahora se encuentra en la gloria celestial de Cristo por haber “dado testimonio de su fe hasta el sacrificio de sangre”.
La declaración concluye confirmando el apoyo de la comunidad copta ortodoxa “a los esfuerzos del estado egipcio” para contener “estos odiosos actos de terrorismo” y “preservar nuestra amada unidad nacional” para un “futuro de paz y prosperidad”.
Los grupos extremistas islámicos han estado luchando durante años en el norte del Sinaí, y se intensificó después de la caída del presidente Mohamed Morsi en 2013 y el ascenso del Estado Islámico en la región al año siguiente.
Varios cristianos también son atacados, asesinados en ataques dirigidos contra individuos y grupos de creyentes. En febrero de 2018, las fuerzas de seguridad egipcias, el ejército y la policía lanzaron una campaña masiva contra los grupos armados y yihadistas, con especial atención a la zona del norte de Sinaí.
En poco más de dos años, más de 840 sospechosos de terrorismo y más de 60 militares murieron, informó Asia News.
*Noticia extraída de Noticiacristiana.com