EE.UU.- El fin del mundo ha sido pospuesto. Al menos según el teólogo de la conspiración y numerólogo cristiano David Meade, que se vio obligado a ajustar su estimación después de su predicción inicial del 23 de septiembre, fue sin incidentes.
Ahora está diciendo que la gente no entiende su teoría y ahora dice que es para el 21 de octubre fecha a tener en cuenta para después de que se establezcan siete años de guerra nuclear y desastre natural.
Dice que “nada” sucederá en septiembre y en su lugar sería octubre “mes de acción” y el comienzo de siete años de “tribulación”. Esto también podría incluir “intercambios nucleares entre Estados Unidos, Gran Bretaña y nuestros enemigos – Rusia, China, Irán y Corea del Norte”, dijo al Sun Online.
‘Involucrará cataclismos climáticos relacionados con el Planeta X o Nibiru – éstos son los juicios de la trompeta de Revelación’, dijo. “Los estantes de los supermercados se limpiarán dentro de un día”, añadió. “Los bancos y los cajeros automáticos no funcionan sin corriente eléctrica. Las bombas de gas no funcionarán.
El transporte de alimentos se detendrá. Los disturbios y los saqueos serán desenfrenados … la sociedad estará en el caos. No sería un buen momento para estar aquí, en serio”.
Su teoría comprensiva para el final de los tiempos o fin del mundo está basada en una mezcla de estudios bíblicos supuestos y ciencia fue presentado en su libro publicado llamado – Planet X the 2017 Arrival y los centros alrededor de un planeta inexistente Niburu que, Meade afirmó, que chocarán con el planeta Tierra.
La sugerencia fue ampliamente rechazada por expertos incluyendo la NASA con un portavoz diciendo: “El planeta en cuestión, Niburu, no existe, por lo que no habrá colisión”.
La agencia espacial se vio obligada a repetir su denuncia anterior después de que surgieran rumores sobre Nibiru en 2012. En ese momento la NASA dijo: “Nibiru y otras historias sobre planetas rebeldes son una broma de Internet. No existen fundamentos fácticos para estas afirmaciones. Si Nibiru o el Planeta X fueran reales y se dirigieran a un encuentro con la Tierra en 2012, los astrónomos lo estarían siguiendo por lo menos durante la última década, y ahora sería visible a simple vista”.
