Una familia cristiana sufre las constantes amenazas por parte de extremistas, después de que su hija fuese liberada de su captor.
La tarde del 2 de Abril, Nupur* de 17 años, y su prima Rekha* caminaban del instituto a casa cuando fueron secuestradas por un grupo de hombres.
Tres días después las autoridades lograron rescatarlas. Las jóvenes fueron encontradas en dos lugares distintos, una en la capital Bangladesí, Dhaka, y la otra, en un distrito cercano.
Cuando fueron liberadas ya habían sido forzadas a convertirse al Islam, y Rekha había sido casada con uno de los secuestradores. A su pesar, Rekha se vio obligada a volver con el secuestrador con el que había contraído matrimonio, mientras que Nupur pudo regresar con su familia.
“Nupur y Rekha siempre han sido muy buenas estudiantes,” cuenta el tío de Nupur. “Se les da muy bien la música y el baile, y han encontrado favor con la gente local. Hay ciertos grupos a los que no les gusta esto, porque son Cristianas; por eso les han hecho esto. Han arruinado sus vidas.”
Uno de los secuestradores no ha dejado de atormentar a Nupur y su familia, puesto que quiere casarse con ella, y amenaza con secuestrarla de nuevo. El muchacho llama por teléfono constantemente, amenazando con alejar a Nupur de su familia, a pesar de la negativa de la joven y de sus padres, que se niegan a ceder a la coacción para casarla con él.
El secuestrador llegó a decirles a los padres de la joven, “¡Si no me la entregáis, me la llevaré yo mismo!” Nupur teme por su vida constantemente, y no sale de casa, prefiriendo permanecer a salvo con su familia.
“No podemos protegerla todo el tiempo,” dice el tío de Nupur. “Tenemos que ir al trabajo. No sabemos cuántos días podamos protegerla. Vivimos con miedo e inseguridad en todo momento. Estamos deprimidos y frustrados. Por otro lado, siempre ha sido muy difícil enfrentarse con los musulmanes [radicales].”
El padre de Nupur cuenta: “Ya no sabemos qué hacer. Nos llama constantemente para amenazarnos, estamos cuidando de nuestra hija, pero no sabemos cuánto tiempo podremos seguir así. Son [extremistas] y son poderosos. No podemos enfrentarlos.”
La familia ya ha presentado una demanda formal debido a la situación.
*Noticia extraída de Puertasabiertas.org