BRASILIA, BRASIL.- El gobernador del Distrito Federal, Rodrigo Rollemberg (PSB) se involucró en una gran polémica el año pasado, cuando hizo justicia al nombre de la sigla a la que pertenece y mantuvo la tradición marxista de oponerse a la libertad de culto. Él autorizó la destrucción de un templo de las Asambleas de Dios, la justificación era que había sido construido en el área pública, en el parque cerca del palacio Jaburu, residencia del presidente Michel Temer.
Sin embargo, no fue el único templo de acuerdo al informe de la RedeTV, fueron 32 templos demolidos por el Gobierno del Distrito Federal, sin previo aviso y sin negociación. En muchos casos, fueron derrumbados con todos los equipos aún dentro del edificio.
La actitud fue vista como “intolerancia” por los religiosos. Daniel de Castro, abogado de las Asambleas de Dios Madureira, hizo una alerta: “Desde el momento en que comienza a patrocinar la demolición, ella [administración Rollemberg] deja de hacer justicia y comienza a ser justiciera. Al ser justiciera, está siendo selectiva con las iglesias yo entiendo que está habiendo persecución religiosa. El Congreso Nacional necesita poner el ojo en eso, pues es una clase que no le gusta mucho a la iglesia”.
Curiosamente, el mismo Rollemberg participó en ese fin de semana de la Convención Evangélica de las Asambleas de Dios en el Distrito Federal (CEADDIF), en Gama. En el culto, pidió oraciones, acompañado por el diputado federal Ronaldo Fonseca (PROS / DF). En un breve discurso, destacó algunas de sus realizaciones a lo largo de los cuatro años como gobernador y pidió oraciones a los pastores presentes.
“Para gobernar una ciudad en un momento tan delicado de la vida política brasileña … la gente necesita mucho discernimiento, de mucha sabiduría. Por lo tanto, si puedo pedir a todos ustedes que son personas de fe, me gustaría pedir la oración de ustedes para que Dios nos dé discernimiento, sabiduría, para que podamos hacer lo mejor para la población de Brasilia”, dijo.
Curiosamente, Rollemberg dijo reconocer la importancia del trabajo de las iglesias evangélicas, y expresó su deseo de que las instituciones continúen desarrollando su trabajo con “tranquilidad y seguridad jurídica”.
Ronaldo Fonseca, que también es pastor y presidente de las Asamblea de Dios de Taguatinga, sirvió como mediador del encuentro, puede ser el candidato a senador en la placa de Rollemberg, que intentará la reelección.
Es importante recordar que si la campaña ya hubiese comenzado la práctica del uso de la sala de la iglesia para pedir votos se considera “delito electoral” . A pesar de que esta solicitud se llama “petición de oración”, como ocurrió en una de las Asambleas de Dios en Campinas (SP) en la última elección.
[ Fuente: Informa DF y Poder Quadrado]