CHINA.- El gobierno de China ha protagonizado una de las más intensas escenas de persecución religiosa a los cristianos del país en los últimos años. En uno de los casos, los fieles pasaron a reunirse en las casas para adorar a Dios después de que las autoridades volcarán el inmueble de la iglesia donde ella funcionaba.
China es un país de contradicciones de conceptos: aunque es una economía capitalista, todo el resto de la estructura de gobierno es comunista, con numerosas regulaciones sobre todos los asuntos e interferencia del Estado en los mínimos detalles de la vida privada.
De acuerdo con informaciones de China Aid, el caso de la iglesia perseguida en la provincia de Hubei, región central del país, es sólo uno de los innumerables casos registrados mes tras mes. Los fieles de la iglesia en Yanji se vieron obligados a dividirse en pequeños grupos para celebrar cultos domésticos en sus casas.
Los funcionarios del Partido Comunista se negaron a renovar la autorización para el alquiler de un edificio para la iglesia, ya que el contrato que estaba cerca de finalizar su vigencia por lo que los fieles quedaron sin opciones. Hay informes, incluso, de que la persecución ganó requintes de violencia, con casos de bombas lanzadas contra los cristianos y agresiones físicas por parte de los funcionarios públicos, que llegaron a dispararles a los fieles en el lodo para humillarlos.
La iglesia de Yanji recibió un comunicado de la Oficina de Asuntos Religiosos del Distrito de Echeng en diciembre de 2016 prohibiendo cultos y otras actividades religiosas, como grupos de estudio bíblicos, bajo el argumento de que el permiso había expirado.
Además, el gobierno prohibió a la iglesia mantener sus programas misioneros. China Aid, una entidad de apoyo a la Iglesia Perseguida en el país y también a los misioneros, informó también que las autoridades fueron, poco a poco, suprimiendo los derechos de los cristianos de Yanji, conforme cada una de las autorizaciones iban expirando.
“Ore por los hermanos de la Iglesia Perseguida alrededor del mundo, que sufren en la piel, literalmente, todo tipo de cercenamiento de la libertad religiosa”, instó China Aid.
[ Fuente: Christianity Today y Christian Times ]