SUDÁN. – Michael Yat y Peter Reith son pastores en el sur de Sudán, pero ambos fueron detenidos en el vecino Sudán. Ellos estuvieron encarcelados durante más de dos años, y casi fueron condenados a muerte. Contra ellos se levantaron varios cargos graves como los delitos contra creencias religiosas y la promoción del odio religioso. Pero lo que realmente preocupa es que se le acusó de espionaje, pues estaban en el país vecino por actividades relacionadas con la iglesia.
Como Sudán es predominantemente islámica, se encontraron en medio de la misma guerra religiosa que divide a los dos países desde el 2011. Sin embargo, nada fue probado y por fin los pastores lograron liberarlos a principios de este año.
Ahora, en una entrevista para la misión de International Christian Concern, los dos ministros hablaron de lo que sucede en el país. Yat cuenta de que fue detenido un día después de predicar en una iglesia en la capital, Jartum. “No tenía ni idea de que Sudán ha declarado la guerra contra los cristianos”, dice. Durante el tiempo en que fue detenido habló con mucha gente y oyó una gran cantidad de cosas sobre las autoridades.
Según él, el gobierno de Sudán no quiere cristianos en el país, especialmente los que puedan hablar con fluidez el árabe, por “temor a que se puede llegar fácilmente a los musulmanes y ganarlos para Cristo”.
Él insiste en que esta es la verdadera razón por la cual Sudán está demoliendo iglesias y deteniendo a todos los líderes cristianos por un simple motivo: el temor de que los musulmanes deban recurrir a Jesucristo. “Ellos no permiten que los pastores lleguen a los musulmanes en Jartum, Darfur y las montañas de Nuba, áreas estrictamente dominadas por los musulmanes”, dice.
El pastor Reith recuerda que todos vivían en un sólo país, pero el Norte ha sido históricamente dominado por los islamistas. Una sangrienta guerra que duró unos 12 años. Al final, el sur de Sudán obtuvo su independencia y muchos cristianos se trasladaron allí, huyendo de la persecución.
A pesar de que la paz ha sido declarada hace seis años, Sudán sigue imponiendo su dura persecución contra los cristianos que permanecen en el país. En los últimos meses, decenas de pastores fueron detenidos por el gobierno de Sudán, la mayoría falsamente acusados ??de actuar contra la seguridad nacional.
Sudán aparece en la lista de Puertas Abiertas como el quinto país con más persecución en el mundo este año 2017. Desde 1993, siempre ha aparecido en el top 20, según publica Christian Post.