EE.UU.- La administración del presidente estadounidense Donald Trump canceló una práctica del ex presidente Barack Obama que alentaba a jóvenes inmigrantes indocumentados a hacer abortos. Por lo tanto la Unión Americana de Libertades Civiles presentó la semana pasada una acción judicial contra el gobierno para que el Gabinete de Reasentamiento de Refugiados suspendiera el incentivo de aborto para menores de edad que son indocumentados en Estados Unidos.
La Administración para Niños y Familias, que supervisa el gabinete de refugiados, divulgó una declaración el lunes (17) afirmando que “no hay derecho constitucional para una adolescente embarazada cruzar ilegalmente la frontera de EEUU y realizar un aborto mientras esté bajo custodia federal “. A principios de este mes, una joven indocumentada de 17 años, identificada apenas como Jane Doe por la justicia, está en proceso de autorización de aborto y se encuentra actualmente en un refugio en Texas.
“Doe está buscando una orden judicial de emergencia para tener acceso a los servicios de aborto, después de que la oficina federal le impidió participar en una consulta médica pre-aborto“, informó Texas Tribune.
“La Oficina de Reasentamiento de Refugiados se negó a dejar salir Doe del refugio para ir a la clínica, incluso acompañada por su tutor y abogado – nombrados por el juez para ser responsables de menores en esta situación”, agregó la publicación. Según la Administración para Niños y Familias, la ley estadounidense entrega al gabinete de refugiados la responsabilidad legal de decidir “lo que es lo mejor para un menor que está dentro del programa de niños extranjeros no acompañados, en este caso, el bebé no nacido”.
“La Oficina de Reasentamiento de Refugiados está prestando una excelente atención a esta joven y su hijo, cumpliendo nuestro deber con los estadounidenses. No podemos ceder nuestra responsabilidad de cuidar de menores y sus bebés, liberándolos a grupos de defensa ideológica”, agregó la organización. Sin embargo, la jueza Tanya S. Chutkan dijo estar “asombrada” ante las restricciones impuestas por el Gobierno, puesto que en EEUU el aborto está permitido desde 1973, cuando el Tribunal Supremo dictaminó que el Estado no puede interferir en la decisión de la mujer sobre la interrupción de su embarazo. “El hecho de que esté aquí ilegalmente no significa que no tenga derechos constitucionales”, dijo Chutkan.
De esa forma, a juicio de Chutkan, quien fue nombrada por el anterior presidente, Barack Obama (2009-2017), el Gobierno de EE UU le estaba ofreciendo a la inmigrante solo dos opciones: volver a la nación de la que había huido para abortar o seguir adelante con un embarazo no deseado. El lugar de origen de la mujer, que lleva 15 semanas de embarazo, no aparece en los documentos judiciales, por lo que se desconoce si el aborto es legal en su país de procedencia. El veredicto emitido está limitado al caso de Jane Doe -nombre genérico para proteger la identidad de la adolescente- y caducará en 14 días, por lo que se prevé que la intervención se dé esta misma semana.