ESCOCIA, REINO UNIDO. – La Iglesia Episcopal de Escocia decidió la pasada semana reconocer y oficializar matrimonios entre personas del mismo sexo. La medida fue aprobada por la mayoría del sínodo interno y coloca a los religiosos escoceses en confrontación directa con el resto de la Comunión Anglicana.
Las iglesias anglicanas de todo el mundo están fuertemente relacionadas con la conservadora Iglesia de Inglaterra y con el arzobispo de Canterbury, Justin Welby.
Este grupo defiende la cláusula que define el matrimonio como la unión exclusiva entre hombre y mujer. Ellos creen que la ley es originaria de la Sagrada Biblia.
Algo similar fue realizado por la Iglesia Episcopal de Estados Unidos que, al liberar los casamientos homosexuales, generó una ruptura permanente con la Comunión Anglicana, que la expulsó de sus órganos.
El reverendo doctor John Armes, obispo de la Iglesia Episcopal de Escocia, se declaró feliz “por las parejas que ahora pueden tener sus relaciones reconocidas por la Iglesia y son bendecidas por Dios”.
Él también dijo estar satisfecho por el significado que la acción representó para la Iglesia y por la manera que todo fue conducido.
A pesar de ser favorable a la medida, el reverendo reconoció la insatisfacción que ella provocó en muchos fieles. “Pero obviamente cualquier cambio como éste también crea dolor y heridas en algunas personas, entonces, como un obispo de la Iglesia, yo lo siento por ellas”, concluyó.
Las partes más “liberales” del clero y de los fieles celebraron la votación favorable. Pero la Iglesia Anglicana de Escocia puede sufrir graves consecuencias, ya que la ley canónica ha sido alterada con la exclusión de la cláusula que rige el matrimonio heterosexual.
El turismo religioso puede aumentar
La decisión de esta quinta, la primera de una iglesia del Reino Unido, fue votada por las siete diócesis escocesas, siendo que sólo la que une a Aberdeen y las islas Orkney votó en contra, y prevé que un religioso puede rechazar, por ejemplo, la ceremonia.
Aun así se cree que Escocia se convertirá en un destino muy buscado para parejas de gays y lesbianas de fe anglicana, principalmente procedentes del Reino Unido y de otros países de Europa, ha publicado O Globo.