ÁFRICA. – Un grupo de hombres en una mega iglesia pentecostal en Sudáfrica abrieron fuego y se arrojaron piedras entre sí por una rivalidad con respecto a una posición de liderazgo vacante en la iglesia.
News 24 informó que el choque ocurrió el jueves frente a la Iglesia Internacional de Santidad de Pentecostés en Silo, Zuurbekom, que dejó a tres personas heridas y hospitalizadas.
La capitana de la policía de Gauteng, Mavela Masondo, explicó que la batalla comenzó temprano en la hora local, cuando un convoy de vehículos que transportaban a los fieles se estacionó fuera de la iglesia.
“Cuando estaban a punto de entrar en las instalaciones de la iglesia, otro grupo que estaba dentro de la iglesia cargó contra ellos y se enfrentaron. Durante el enfrentamiento, utilizaron las armas de fuego y tres personas resultaron heridas”, agregó.
Otros 12 autos sufrieron graves daños en la lucha, mientras que la policía confiscó las armas de fuego. Un testigo que optó por permanecer en el anonimato dijo a TimesLIVE que los dos grupos de la iglesia rivales sostuvieron conversaciones al principio, pero luego comenzaron a arrojarse piedras, lo que llevó al tiroteo.
“Las personas que disparaban no parecían miembros de la iglesia”, dijo el testigo. “Estaban fuertemente armados”, agregó.
IPHC, que cuenta con más de 3 millones de fieles en Sudáfrica y los países vecinos, se ha dividido luego de la muerte en 2016 de su líder, Glayton Modise. Las peleas por el papel de liderazgo vacante han llevado a una serie de batallas judiciales, pero el problema sigue sin resolverse.
Otro congregante que no fue identificado dijo a News24 que él y otros que llegaron el jueves por la mañana en el convoy de vehículos fueron atacados “sin ninguna razón”.
“Acababa de llegar un grupo numeroso, armados con pistolas, palos y ladrillos, y nos atacaron. Luego huimos a pie, dejando atrás nuestros vehículos. Luego dañaron nuestros autos y dispararon tiros en nuestra dirección”, afirmó.
El evento del jueves estaba destinado a ser una conferencia de hombres, que comenzó con el canto antes de que estallara la pelea.
Un testigo presencial dijo que los miembros de la iglesia que disparaban armas “parecían no estar tratando de matarlos, sino que simplemente estaban tratando de asustarlos”.
Otro miembro de la iglesia que regresó ileso a su vehículo dijo que estaba en shock por lo que había sucedido. “Todo lo que podía pensar era en Dios. Dios estaba con nosotros porque dispararon muchas veces, pero solo una persona resultó herida”, dijo el hombre.
“Dios sabe por qué sucedió esto y nos vengará”, agregó. Juró que la adoración en la iglesia continuará a pesar de los disparos. “Vamos a quedarnos aquí en la iglesia y orar por eso”, dijo.
