En Burkina Faso, África, insurgentes asesinan unas 42 personas tras un ataque yihadista en la víspera de Navidad. El trágico suceso lo calificaron como el peor, en los últimos cinco años, según ABC Internacional.
Los insurgentes islamistas mataron a 35 civiles, 31 de estos mujeres, y siete soldados durante el ataque contra una base militar y el centro de la ciudad de Arbinda, cerca de la frontera con Mali.
El presidente burkinés, Roch Marc Christian Kabore, decretó dos días de duelo nacional.
El martes por la mañana «un número significativo de terroristas atacó el destacamento militar y las poblaciones civiles de Arbinda simultáneamente», destacó el comunicado del gobierno.
El ataque, de «una intensidad poco habitual», duró varias horas y precisó de apoyo de la Fuerza Aérea.
«Mientras huían de manera cobarde los terroristas mataron a 35 civiles, de los cuales 31 eran mujeres, e hirieron a otras seis civiles y una veintena de soldados», manifestó el gobierno.
La rápida respuesta de los gendarmes y las fuerzas armadas permitió «neutralizar a 80 terroristas», según un comunicado del Estado Mayor del Ejército.
El mandatario reconoció la «acción heroica de los soldados» que lucharon contra los terroristas y detalló que las Fuerzas de Defensa y Seguridad del país lograron recuperar importantes equipos militares y medios de transporte.
«Cien motocicletas, armas y municiones en grandes cantidades, también las recuperaron en manos de los yihadistas».
Pocas horas después de este atentado, al menos once soldados murieron en una emboscada en la provincia de Soum, situada en el norte de Burkina Faso.
Los soldados pertenecían al destacamento militar situado en Namissiguian (centro-norte) y se encontraban patrullando en la provincia de Soum en el momento de la emboscada.
Esta región es golpeada regularmente por ataques atribuidos a grupos afiliados a Al Qaida y Daesh, cuyos objetivos son civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.
En junio casi una veintena de residentes de Arbinda murieron durante el asalto perpetrado a plena luz del día por decenas de hombres armados. Dos meses antes, 62 personas fueron asesinadas en tan solo tres días tras varios ataques yihadistas y enfrentamientos entre comunidades.
A inicios de diciembre, 14 personas fueron asesinadas en un ataque perpetrado contra una iglesia cristiana.