EE.UU.- Un reciente estudio realizado por la Universidad de Purdue, en Estados Unidos, confirmó en un registro arqueológico la existencia de 53 figuras mencionadas en la Biblia. Lawrence Mykytiuk, profesor de Biblioteconomía de la institución educativa, desarrolló un sistema para comparar los nombres de las figuras bíblicas con inscripciones descubiertas en excavaciones arqueológicas.
Para que la historicidad de las figuras bíblicas fuera determinada, el nombre bíblico debería corresponder al nombre de una inscripción auténtica, sin que hubiera la posibilidad de una falsificación.
Los nombres de la Biblia y de la inscripción deberían corresponder a la configuración y el período del tiempo. Además, la figura bíblica también debería tener al menos tres detalles específicos que identificar a un individuo, como nombre, nombre del padre y título.
“Si corresponde a tres menciones en la Biblia, es una certeza virtual”, dijo Mykytiuk al Times of Israel. ¿Puede haber algunas personas con el mismo nombre y nombre del padre, pero con el mismo título? Eso sería demasiado coincidencia”.
A través de su sistema, Mykytiuk logró verificar la existencia de reyes, faraones, sacerdotes y escribas, estudiando 94 inscripciones. Él observó que todos los nombres son del sexo masculino, pero espera identificar a una mujer en las inscripciones.
El profesor, sin embargo, advirtió que las verificaciones de los nombres bíblicos no comprueban necesariamente los eventos bíblicos que involucran a estos individuos. Hasta ahora, Mykytiuk verificó la existencia de ocho reyes del Reino de Israel y seis del Reino de Judá, incluyendo personajes importantes como los reyes David y Ezequías.
El profesor continúa sus verificaciones envolviendo figuras del Nuevo Testamento y su próximo artículo incluirá la verificación de 23 figuras de la Nueva Alianza. Él explica que las verificaciones del Nuevo Testamento, a diferencia del Antiguo, incluirá a hombres y mujeres.
Mykytiuk, que se ha involucrado en las verificaciones bíblicas desde 1992, pretende terminar en 2017 su artículo sobre figuras religiosas del Nuevo Testamento, como Juan Bautista, Gamaliel y los sumos sacerdotes.