TURQUÍA.- En 2010, todo el mundo fue engañado por una falsa excursión de arqueólogos chinos y turcos que afirmaban haber desenterrado el Arca de Noé desde lo alto del monte Ararat, en Turquía. Después de varios exámenes minuciosos por expertos, quedó demostrado que se trataba de un fraude.
Ahora, una expedición norteamericana está trabajando en la misma región y dijo ya tener nuevos indicios del Arca mencionada en la Biblia, pero no en el mismo lugar.
Los investigadores liderados por el profesor Raul Esperante están trabajando en la región montañosa de Ararat, también conocida como Monte Agri, en el este de Turquía.
Él hizo la revelación durante el Simposio Internacional sobre el Monte Ararat y el Arca de Noé, realizado en la ciudad de Agri. Estaban presentes 108 científicos de varias partes del mundo.
Esperante trabaja en el Geoscience Research Institute perteneciente a la Iglesia Adventista de Estados Unidos. El subrayó que el objetivo de su equipo es “visitar los alrededores de la montaña para encontrar pistas sobre eventos catastróficos en el pasado. Tenemos recursos técnicos y podemos trabajar en conjunto con expertos locales”.
Sin embargo, dejó claro que “es necesario un trabajo científico riguroso y serio sobre ese tema” y desea dar su colaboración.
“El resultado de mis descubrimientos pronto será publicado en libros y revistas científicas, pero todavía es demasiado pronto para dar una palabra final. Cuando la comunidad científica reconozca la existencia del Arca de Noé en el Monte Ararat, podemos poner a disposición todo lo que encontramos para el público”, afirmó.
El profesor Oktay Belli, arqueólogo de la Universidad de Estambul y miembro del Instituto Turco de Historia Antigua, está convencido: “El Arca de Noé y el Diluvio no son un mito, sino un evento real, mencionado en diferentes libros sagrados”.
El texto de Génesis 8: 4 dice que el Arca reposó sobre los montes de Ararat en el 150º día del diluvio. El Dr. Andrew Snelling, un científico cristiano que trabaja con el ministerio Answers In Genesis, explica que “varios equipos ya buscaban el arca. La mayoría de ellos se concentraron en el Monte Ararat, en el noreste de Turquía, donde se sabe que existe una estructura de madera enterrada bajo toneladas de sedimentos.
Pero él explica que la dificultad de encontrar pruebas inequívocas puede ser por una interpretación errónea. “El diluvio fue una catástrofe global que remodeló totalmente la geología de la Tierra, y la superficie del planeta continuó cambiando desde entonces. Tal vez la geología de la región moderna del Ararat no permita que encontremos los restos del Arca de Noé en aquella montaña.
Para el profesor Esperante hay que tener en cuenta que el Ararat es una estructura volcánica y que existen muchas capas de lavas y cenizas allí datados de la época posterior a la que el Diluvio ocurrió. “El monte Ararat es, por lo tanto, un volcán post diluviano, que siguió entrando en erupción, siendo la última vez hace menos de 200 años. Como geólogo bíblico, no espero encontrar el Arca de Noé en lo alto del Monte Ararat, pero hay otras evidencias en su entorno.
[Fuente: Express]