La NASA quiere evitar que la grantormenta solar que se espera para algún momento de los próximos dos años sea una catástrofe mundial, así que está desarrollando un sistema preventivo para evitar un posible apocalipsis. La invención, llamadasolar shield, escudo solar en castellano, consistiría en un sistema para poder minimizar los efectos de las tormentas solares sobre el planeta Tierra.
Las tormentas solares consisten en enormes descargas de partículas de alta energía por parte del Sol que provocan grandes fluctuaciones magnéticas.
Estas fluctuaciones, a parte de provocar problemas en los aparatos electrónicos y enloquecer a las brújulas, pueden llegar asobrecalentar peligrosamente las redes eléctricas, llegando a desconectarlas o incluso dejarlas inservibles. Estas tormentas suelen seguir un ciclo aproximado de 11 años, y una vez cada 100 años, más o menos, tiene lugar una gran tormenta solar.
Por ejemplo la última gran tormenta lugar tuvo lugar en el año 1859 y fue conocida como el Evento Carrington. Esta tormenta provocó la interrupción del tráfico de telégrafos, e incluso provocó el incendio de algunas centralitas.
Debido a esto solo podemos teorizar sobre lo que haría una gran tormenta solar en nuestro mundo actual, donde los aparatos eléctricos son tan abundantes y están tan ligados a nuestro día a día, que si por ejemplo todos los equipos electrónicos se estropearan tendríamos que volver a una forma de vida parecida a la de la Edad Media.
Para evitar esto la NASA está desarrollando el escudo solar, que no sería más que utilizar a la sonda SOHO y a las dos sondas gemelas STEREO para detectar el inicio de una tormenta solar y poder avisar a las grandes redes eléctricas para que se desconecten temporalmente y así evitar su sobrecalentamiento.
Este sistema es aún experimental y no ha sido probado, pero se espera que la NASA lo tenga listo para la próxima gran tormenta solar, que será en algún momento entre los años 2012 o 2013. Solo esperemos que el escudo solar esté preparado y nos salve del fin del mundo tal y como lo conocemos.
