MEXICO. – Mientras que el narcotraficante mexicano El Chapo espera en los Estados Unidos, la sentencia que lo puede llevar a ser condenado de por vida en la prisión, su madre está en México orando continuamente por su hijo para que entregue su vida a Jesucristo.
“Que él, antes de que sea demasiado tarde, se entregue al Señor porque ya probó el mundo”, dijo María Consuelo Loera Pérez, hoy con 90 años, desde lo alto de las montañas de Badiraguato, un pequeño pueblo rural en el estado mexicano de Sinaloa, habló a las cámaras de Univision en 2014.
En febrero, Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, de 61 años, fue encontrado culpable de los diez cargos que tenía en su contra por un jurado de Nueva York. La sentencia, que será leída el 25 de junio, debe llevarlo a cadena perpetua en el Supermax, presidio federal de máxima seguridad en el estado de Colorado (EEUU).
Dona Consuelo, como é conhecida pelos vizinhos, tem uma vida simples, longe dos luxos que cercavam seu filho. Sua casa é cercada por lembranças e uma televisão antiga, que ela nunca assiste. “Em vez de perder tempo assistindo TV, me dedico a estudar a Bíblia”, disse a mãe de El Chapo, que lê entre quatro e cinco capítulos diariamente.
Doña Consuelo, como es conocida por los vecinos, tiene una vida sencilla, lejos de los lujos que rodeaban a su hijo. Su casa está rodeada de recuerdos y una televisión antigua, que nunca asiste. “En vez de perder tiempo viendo TV, me dedico a estudiar la Biblia”, dijo la madre de El Chapo, que lee entre cuatro y cinco capítulos diariamente.
Después de ser bautizada en la Iglesia Apostólica en la Fe en Jesucristo, Doña Consuelo cuenta que nunca desistió de orar por el cambio del hijo. “Como madre, estoy siempre pidiendo por el bienestar de él y, como madre, estoy sintiendo lo que está pasando con él. Yo tengo un Dios que me ayuda y me fortalece”, subrayó.
Historia
El Chapo (apodo que significa “el pequeño” en portugués) fue creado con diez hermanos en Badiraguato. En el año 2002, fue reclutado en la adolescencia por el jefe del cártel de Guadalajara, Miguel Angel Félix Gallardo, que fue arrestado en 1989. A continuación, fundó con tres socios el cártel de Sinaloa, que creció de forma meteórica hasta convertirse en el más grande del mundo.
Con el paso del tiempo, El Chapo se convirtió en el traficante de drogas más buscado del mundo, acusado de enviar estupefacientes de América Latina a Estados Unidos, Europa y Asia. Con una fortuna estimada en 1.000 millones de dólares, permaneció en el ranking de billonarios de la revista Forbes hasta 2013.
Cuando supo de la captura de su hijo, Doña Consuelo confesó: “Dios me está dando fuerza y sé que Él está conmigo y con mis hijos”, afirmó. “Yo confío que Dios me protege y tocará los corazones de las autoridades que lo arrestaron [El Chapo] y un día reconocerán que ellos también tienen un Dios para perdonarlos”.
Preguntada sobre un mensaje que quisiera dejar a su hijo, Consuelo dijo: “Que él, antes de que sea demasiado tarde, se entregue al Señor porque ya probó el mundo, ya supo lo que había en el mundo. Que ahora él busque a Dios para que sepa que Dios es el único que puede protegerlo y ayudar en todos los problemas”.
La madre de El Chapo dijo que está rodeada de hermanos en la fe. “Ellos están orando por él, en todas las iglesias, y sé que el Señor mueve todos los corazones. Dios moverá los corazones para que lo ayuden y luego sea liberado. Lo que es imposible para el hombre, para Dios es posible”, subrayó Consuelo.