Los mil millones de personas en el mundo están todavía lejos de la oportunidad de aprender sobre el mensaje de Jesucristo, según la organización Alliance for the Unreached (Alianza para los no alcanzados en traducción libre).
“De los siete mil millones de personas del planeta Tierra, unos 3.200 millones de personas -lo que representa cerca del 40% de la población- no tienen oportunidad de escuchar el Evangelio donde viven, en su ubicación”, dijo el director de la organización, Wayne Pederson, a CBN News.
Según la organización Joshua Project, la situación más crítica está en Asia, donde cerca del 60% de la población aún desconoce a Cristo. Otros países que necesitan misioneros son Marruecos, que posee sólo 12 mil cristianos (cerca del 0,2% de la población) y Sahara Occidental, donde aproximadamente el 99,9% de la población es musulmana sunita.
Para aumentar la concientización de los cristianos sobre esta realidad, la organización está promoviendo el Día Internacional de los no alcanzados, que se celebrará el 20 de mayo en el día de Pentecostés.
Con base en la Gran Comisión, descrita por Jesús en Mateo 28: 19-20, Pederson destacó la importancia del último mandamiento de Cristo en la Tierra: “Debemos prestar atención a las últimas palabras de una persona.
En este caso, Jesús dijo llevar el Evangelio a los confines de la tierra.
“Estamos hablando de personas que nacen, viven y mueren sin que nadie haya hablado nunca las Buenas Nuevas del amor de Dios por ellas”, lamenta Pederson. “¿Qué será necesario para que ese concepto de personas no alcanzadas se vuelva totalmente intolerable para nosotros, como Iglesia?”.
Muchos ministerios vinculados a la Alianza para el Unreached han diseminado el Evangelio en las regiones más remotas del mundo. Uno de los ejemplos de ello es el trabajo de la Misión Mundial, que ya ha distribuido más de 40 mil biblias en audio alimentadas por energía solar.
“Hay muchas partes del mundo donde la alfabetización es inferior al 30%. Entonces usted puede distribuir biblias impresas por un día entero y la gente no va a leer. Pero, colocando la Biblia en un reproductor de audio en su propio idioma, ellos oirán”, explicó Pederson.
“Si fuimos tocados por el amor de Cristo y experimentamos su salvación, su perdón y la promesa de la vida eterna, cualquiera de nosotros debe compartir todo esto con nuestro vecino del lado o nuestro vecino alrededor del mundo”, concluyó Pederson.
[ Fuente: CBN News ]
