MANCHESTER, EE.UU.-Los cristianos de diversas iglesias aprovecharon el festival anual de música y artes Bonnaroo, que tuvo lugar entre los días 8 y 11 de junio en Manchester, en Estados Unidos, para evangelizar a los jóvenes participantes.
Más de 400 evangélicos estuvieron en el Great Stage Park, en Tennessee, para llevar el amor de Dios a los jóvenes que estuvieron cuatro días entregados a las drogas, embriaguez y devastación.
Cerca de 750 personas se rindieron a Jesucristo, en medio de un público de 65 mil.
En medio de los shows de bandas como U2, Red Hot Chili Peppers y The Weekend, los cristianos levantaron una carpa con el nombre “Love Bonnaroo” donde realizaron intercesión, adoración y evangelismo creativo.
Según relatos del pastor Larry Tomczak, los efectos de las drogas y bebidas hacían algunos participantes del festival experimentar una sensación de “peso”.
Sin embargo, dentro del área donde los cristianos estaban actuando, ellos decían experimentar una atmósfera “limpia y ligera”.
“Una niña que estaba bajo efecto de drogas cayó cerca de las tiendas del ministerio. Después de ser socorrida por los cristianos, ella recibió una canción profética acerca de ella. “Hemos podido verla estando llena del amor de Jesús”, cuenta Tomczak.
Después de escuchar las verdades del Evangelio, la niña lloró y aceptó a Jesús. El pastor también cuenta que el equipo oró para que ella fuera llena del Espíritu Santo. “Ella volvió transformada a sus amigos, y ellos vinieron hasta la tienda para descubrir lo que había sucedido”, relata.
En la carpa de arte del ministerio Love Bonnaroo, otra situación impactante involucró a un padre que estaba acompañando a su hija en el festival. Después de ser calurosamente recibido, aceptó recibir una pintura personalizada en su cara.
Después del primer trazo de tinta en su ojo, Maddie, una artista profética, susurró: “Dios te ve como un buen padre”. Al oír esto, una lágrima escurrió por el rostro de aquel hombre. Después del segundo trazo, Maddie continuó: “Dios te ve como alguien que no desiste”.
El corazón endurecido del hombre fue impactado y él cedió a las lágrimas.
Después de llorar, el hombre reveló un secreto a Maddie. “Hoy era para ser el último día con mi familia. Yo estaba planeando irme y dejarlos para siempre. Quiero que usted sepa que voy a quedarme. Usted salvó a mi familia”, reveló.
El pastor Jerry Bryant, que también estuvo en el evento, dijo que estaba impactado con el actuar de Dios durante el festival. “Parecía que la gente estaba de vuelta al movimiento de Jesús”.
Scott y Sara MacLeod, que lideran el ministerio Escuela del Trueno, fueron sorprendidos por el evidente hambre espiritual entre las personas. “Eran como peces saltando al barco”.