NIGERIA.- La ola de asesinatos que involucran cristianos en la República Federal de Nigeria, el país más poblado de África, está revelando una posible complicidad del presidente, Muhammadu Buhari, con el crecimiento de los grupos extremistas islámicos como Boko Haram y el origen étnico “Fulani”.
Sólo el último fin de semana, al menos 86 personas murieron en el estado de Plateau, ubicado en la región central de Nigeria.
Sin embargo, ese fue el número reconocido por el Gobierno, pero se cree que puede ser mucho mayor, ya que hasta niños fueron asesinados.
Los ataques del fin de semana fueron atribuidos al grupo terrorista islamista Boko Haram, que de acuerdo a un informe presentado en la conferencia anual conmemorativa Murtala Mohammed, que se celebró en el Centro de Yar’Adua Shehu en Abuja el año pasado, ha matado a cerca de 100.000 personas a lo largo de los años.
Otro grupo, sin embargo, viene ganando repercusión por el aumento de sus ataques. Este es el grupo ”Fulani “, un grupo étnico que se extendió durante varios países africanos como Senegal, Guinea, Gambia, Sierra Leona, Guinea-Bissau y Camerún, así como Nigeria.
Para Emmanuel Ogebe, responsable de una organización que pretende garantizar la libertad religiosa de los cristianos en el país, “es desconcertante que una pequeña minoría musulmana pueda aterrorizar a los cristianos, que son en mayor número en los estados de Benue y Plateau”.
La explicación para ello puede estar en el financiamiento externo. Es en lo que cree el parlamentario Peter Ibrahim Gyendeng. “Los ataques fueron cometidos por grupos de tiradores que portaban armas sofisticadas, incluso fusiles de asalto”, dijo al diario “Nigerian Tribune”.
La etnia Fulani está formada en su mayoría por agricultores, lo que hace creer que están siendo equipados por grupos más organizados o incluso apoyados indirectamente por el Gobierno. La mayor evidencia de ello es la negligencia con que el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, está tratando los atentados.
Buhari es musulmán y forma parte de la etnia Fulani. Para Bosun Emmanuel, secretario del Foro Nacional de Ancianos Cristianos, él viene siguiendo “abiertamente una agenda anticristiana que ha resultado en innumerables asesinatos de cristianos en todo el país y en la destrucción de comunidades cristianas vulnerables”.
A pesar de que el Presidente Buhari ya se pronunció sobre los nuevos ataques, diciendo en Twitter que no “descansará hasta que todos los asesinos y elementos criminales y sus patrocinadores estén incapacitados y llevados a la justicia”, si las medidas enérgicas no se toman con urgencia, el cristianismo puede dejar de existir en Nigeria.
“En 2018, podemos decir que en 25 años, nos encontramos ante el riesgo de ser los últimos cristianos en Nigeria”, dijo Emmanuel, de acuerdo a la información de CBN News.