Chiapas, uno de los estados de México que se encuentra en semáforo naranja, pudo reactivar los cultos en las iglesias con un aforo del 25%, y cumpliendo con los protocolos de seguridad establecidos por el Ministerio de Salud.
En la capital Tuxtla Gutiérrez, la iglesia del Shadday Ministerio de Dios tuvo su primer culto presencial, los congregantes debieron registrarse en una mesa de datos y pasar por el filtro de sanidad.
“Ha sido bastante raro el regreso a la iglesia, lo anhelábamos con todo el corazón pero se siente totalmente diferente por todas las medidas de higiene que se deben seguir, como por ejemplo la sana distancia, lavarse las manos, entre otras. Gracias a Dios ya estamos aquí para alabar al Señor”, dijo una congregante.
En México, aún son pocas las iglesias que han retomado las actividades presenciales, pues se requiere de personal que esté a cargo del ingreso y salida.
En las ciudades con mayor caso de Covid-19 establecieron la cancelación de actividades religiosas, sin embargo en algunas comunidades rurales las iglesias no cerraron ni suspendieron reuniones.
La nueva normalidad ha implicado cambios en algunas prácticas de la iglesia, prueba de ello es la toma de la Santa Cena, que en esta ocasión fue servido de lugar en lugar cuando antes se pasaba a tomarla en el altar.
“Es una gran bendición en el poder estar nuevamente en la iglesia y ver a los hermanos con la alegría a la que asistieron, para mí como pastor es la satisfacción más grande que Dios puede darme”, manifestó el pastor Antonio Hidalgo.
La Secretaría de Salud de Chiapas informó que la entidad inicia la sexta semana en semáforo naranja con un acumulado de 6 mil 200 casos positivos de COVID-19.
En las últimas horas se confirmaron 13 casos nuevos, mientras que el número de pacientes recuperados alcanzó los 5 mil 295.