EE.UU.- A pesar de las muchas advertencias bíblicas contra la práctica de la brujería, la supuesta pastora norteamericana Valerie Love insiste en que “no hay nada de malo” en los cristianos en ser brujos. Ella inició una escuela para enseñar “magia” a todos los interesados, incluidos los cristianos y defiende que todo lleva a una “conciencia espiritual”.
“Deja de pensar que puedes decir a la gente cómo adorar. Deja de pensar que puedes decir a la gente cómo conectarte con lo divino. ¿Cuántas personas ya me dijeron: ‘Usted no puede ser una bruja cristiana’, pero aquí estoy … Eso es entre mí y Dios. Usted no puede decirme cómo orar”, declaró en un vídeo publicado en las redes sociales y que le generó muchas críticas.
La auto intitulada pastora, aunque no diga a qué iglesia pertenece, justifica que “nació bruja” y que “las personas tienen miedo de la palabra [bruja] debido al miedo y a la ignorancia”. Ella asegura ser una “ministra del Dios vivo para disipar ese miedo y esa ignorancia”.
A través de su sitio, Christian Witches (Brujas Cristianas), Love comparte su historia de vida y divulga cursos de brujería que serían parte de un “movimiento”.
Su escuela, con clases presenciales, garantiza que fue creada para “inspirar, enseñar, compartir sabiduría y mostrar cómo se puede usar la magia como un camino para la autorrealización”.
“La gente vive en un cautiverio religioso porque la religión le dice qué pensar, qué hacer. No estoy aquí para decirle qué pensar”, insiste.
Ex bruja niega
Jennifer LeClaire, líder de la Casa de Oración Despertar, en Florida, es una ex bruja que se ha convertido a Cristo. Desde entonces viene alertando a las personas sobre la seriedad de moverse con el ocultismo.
Ella viene acompañando ese movimiento de “magos cristianos” hace varios años y cree que se trata de un espíritu de engaño. “He visto el aumento del interés de los cristianos por la brujería. Yo no puedo juzgar la salvación de nadie, pero cuando las personas que frecuentan una iglesia liberan maldiciones, oran contra usted, y conducen actos profanos para la destrucción, el fruto del Espíritu está claramente ausente”, advierte.
Destacando el texto de Gálatas 6, ella recuerda que la “brujería” es una de las obras de la carne. “La pena por practicar hechicerías bajo la Ley mosaica era la muerte (Éxodo 22:18, Levítico 20:27) … En el corazón de la brujería está el deseo de conocer el futuro y controlar los acontecimientos. Estas habilidades pertenecen sólo al Señor. Este deseo tiene sus raíces en la primera tentación de Satanás a Eva: ‘Usted puede ser como Dios’ (Génesis 3: 5)”, explicó.
Con información de Christian Post
