Ani, una joven proveniente de familia musulmana, asegura que desde que tenía 13 años ha sentido el llamado de Dios. Pese a su religión, siempre estuvo rodeada de amigos cristianos con quienes compartía versículos de la Biblia lo que le despertó una curiosidad por la fe.
Ani, a menudo comparaba las acciones de la familia de una amiga que era cristiana. Observaba que siempre rezaban juntos por la mañana cuando se despertaban, durante las comidas y antes de terminar el día. Ella podía decir que se amaban.
Mientras que en la familia de ella existía una atmosfera distinta, su u padre es un musulmán kejawen (de etnia javanesa que también practica la enseñanza espiritual tradicional), su madre es musulmana y se adhiere solo a las enseñanzas religiosas, no a los rituales tradicionales.
La notable diferencia entre las familias hizo que Ani se preguntara: “¿Quién es este Dios adorado por esos cristianos?”.
Aunque Ani participaba activamente en las actividades islámicas, también tenía amigos cristianos y disfrutaba pasar tiempo con ellos.
Fueron muy acogedores y amables. A Ani le encantaba escuchar canciones cristianas. A veces se unía a los servicios de adoración y escuchaba testimonios de musulmanes que se convirtieron en seguidores de Jesús.
Estos testimonios conmovieron su corazón y su curiosidad creció. Según, ella se sentía más cómoda cuando estaba con sus amigos cristianos.
Había algo que evitaba que la mujer se convirtiera a Cristo y era la atracción que sentía por un joven que solía orar en la mezquita cerca de su casa. Este hombre era la razón por la que Ani insistía en ir a la mezquita a pesar de que su corazón prefería pasar el rato con amigos cristianos.
Debido a que Ani, estaba manifestando emociones encontradas, tuvo que ver a un psiquiatra, porque a menudo sentía que el Corán y la Biblia hablaban en su mente.
Sus padres, decidieron llevarla a un ustaz (un maestro religioso) para recibir oración. Cuando estaba orando, Ani perdió el conocimiento. Vio una luz brillando en su frente, y había una forma de cruz.
Después de que recuperó la conciencia, el ustaz dijo que durante la manifestación, Ani estaba invocando el nombre de Jesús. Paso a paso, se acercó a Él.
Luego de haberse convertido a Cristo, su familia musulmana no tuvo ningún problema en aceptarla, pero al pasar el tiempo, los musulamanes de su aldea la atacaron y pusieron un aviso en los periódicos con la declaración falsa de que la mujer se convirtió al cristianismo porque fue embarazada por un hombre cristiano. Incitaron al padre de Ani a que la maltratara.
Bajo la influencia de los familiares por la humillante noticia, el padre de Ani la golpeó tan fuerte que casi muere.
Con el paso del tiempo, sus padre recapacitaron y las cosas volvieron a la normalidad , hasta la fecha, Ani ha seguido creciendo en su fe
