Musulmanes radicales atacaron a una pastora de una iglesia, en el este de Uganda, mientras regresaba a su casa en Kapyani, distrito de Kibuku, de los preparativos navideños en su iglesia, en horas de la noche.
Según relata, varios hombres salieron gritando de un monte: “Alá es más grande, les hemos advertido a varios tiempos para dejar de convertir a los musulmanes al cristianismo. Hoy te enseñaremos una lección que no olvidarás”.
En ese momento, uno de ellos sacó un pañuelo y le tapó la boca, de inmediato perdió el conocimiento. Cuando volvió a recuperarlo tres horas después vio la luz de una motocicleta y comenzó a pedir ayuda.
“Para mi sorpresa, me di cuenta que era un hijo de mi hermana que regresaba a casa para Navidad, vio sangre en mi falda rota. No pudo evitar que las lágrimas rodaran por sus mejillas, llorando y gritando pidiendo ayuda, y me llevó a una clínica cercana para recibir tratamiento médico”, dijó la líder de 50 años.
En el hospital los médicos le brindaron atención y le hicieron exámenes para corroborar que no la hubiesen infectado con enfermedades mortales.
Sus hijos denunciaron lo que había ocurrido al presidente y a la policía del centro de Kapyani, con el fin que hicieran algo al respecto.
“Dos meses antes, un vecino musulmán se había quejado con ella y le había dicho que no fuera a su casa porque sus hijos ahora estaban cantando algunas canciones cristianas. Sé que pronto vendrán a tu iglesia. Nosotros, como musulmanes, no tenemos relaciones con los infieles”, expresó.
Según indicó, los musulmanes de la zona se encuentran indignados porque la pastora en su iglesia ha recibido a personas que desean convertirse al cristianismo.
Por el momento se encuentra recuperándose de las heridas que le ocasionaron en el ataque, aunque un miembro de su iglesia expresó que la pastora está traumatizada.
“A veces está callada durante aproximadamente una hora, su médico dijo que necesita un consejero de trauma; tiene dolor de cabeza severo, hinchazón en el cuello y dolor severo en sus partes íntimas”, manifestó.
Los hijos de la pastora han solicitado mucha oración por la recuperación de su madre, e igualmente ayuda financiera para los gastos médicos.
