NUEVA YORK, EE.UU.- Las Naciones Unidas decidieron reservar 1.300 millones de dólares para ayudar a la Autoridad Palestina (AP) a frenar una guerra diplomática contra Israel. De acuerdo con un informe publicado recientemente , este dinero es parte de un programa titulado “Marco para la Asistencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo del Estado palestino”.
Siendo establecido entre 2018 y 2022, su objetivo es promover iniciativas que apoyen el “camino de Palestina a la independencia”.
La iniciativa, que no tiene paralelos en la historia de la organización, proporcionará “capacitación, y asesoramiento técnico” para ayudar a las “víctimas palestinas” a explotar los “mecanismos internacionales de rendición de cuentas” necesarios y denunciar las “violaciones israelíes del derecho internacional”.
Las prioridades establecidas son “acabar con la ocupación [de Israel], alcanzar la independencia, movilizar el apoyo internacional, ampliar la inversión internacional en Palestina, expandir las relaciones bilaterales de Palestina y responsabilizar a Israel”.
La ONU también prometió supervisar “el impacto de las violaciones israelíes” e invertir en “actividades conjuntas que comunican claramente el efecto que la ocupación y las violaciones del derecho internacional que tienen sobre la capacidad de Palestina de desarrollarse”.
No hay, en todo el documento, ninguna mención a los ataques terroristas de palestinos contra Israel, ni a las acciones de grupos extremistas islámicos como Hamas, Yihad Islámica o las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, vinculadas al gobierno de Palestina.
El director ejecutivo de UN Watch, Hillel Neuer, criticó a las Naciones Unidas por concentrarse exclusivamente en Israel, diciendo que “no hay otro ejemplo o precedente de este tipo de financiación, formación y asesoría dada por la ONU a un lado en un conflicto para que pueda usar el sistema legal contra otro lado, especialmente dentro de los órganos de las Naciones Unidas y junto a otras instituciones internacionales.
“El Estado de Israel necesita ser tratado como cualquier otro estado, siguiendo exactamente las mismas reglas”. Para el que no sabe, la ONU no financia, entrena o aconseja a víctimas palestinas de las violaciones de los líderes palestinos ni las víctimas israelíes de ataques palestinos, ya sea por lesión de balas, bombas o atropellados, insiste el director de la UN Watch.
“La ONU tampoco protege, entrena o aconseja a las víctimas kurdas de las violaciones de derechos humanos infligidas por los turcos, iraquíes o iraníes. Tampoco reciben apoyo las víctimas yemenitas de las violaciones sauditas e iraníes o las víctimas tibetanas de la constante violación china de los derechos humanos”, aseveró.
Neuer finalizó diciendo que “por algún motivo, sin embargo, cuando se trata de Israel, las agencias de desarrollo de la ONU sobrepasan la línea roja, pasando de la asistencia humanitaria a la clara defensa política”.
La ONU está dominada por los musulmanes
La denuncia de UN Watch es una más para mostrar cómo el Islam político ha impuesto su agenda no sólo en los medios de comunicación, sino también en la política mundial . La Organización para la Cooperación Islámica, formada por 56 Estados de Oriente Medio, África, Asia y Europa, domina a todos los órganos de la ONU-a excepción del Consejo de Seguridad- por el criterio de representatividad. Acabó estableciendo una serie de parámetros impensables hace algunas décadas, como Arabia Saudita liderando el Consejo de Derechos Humanos.
A lo largo de su historia, las Naciones Unidas ya aprobaron cerca de 100 resoluciones contra Israel, la mayoría se refiere a Palestina. Sin embargo, prácticamente no hay resoluciones ni reprensiones a países como Arabia Saudita, China y Cuba, conocidos por el incumplimiento de los derechos humanos y la libertad religiosa.
Debido a esta histórica postura anti-Israel de la ONU es que Estados Unidos ha anunciado recientemente su salida de la UNESCO, la agencia de la educación y la cultura de las Naciones Unidas.
El gobierno de Donald Trump ha reclamado de diversas acciones de la ONU, como la falta de apoyo a los cristianos perseguidos. Por lo tanto, se anunció el mes pasado que el Departamento de Estado “dejará de financiar los esfuerzos ineficaces de ayuda de la ONU y los Estados Unidos proporcionará apoyo financiero directamente a comunidades perseguidas por la USAID [Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional] .
