Sonia Bibi, de 24 años, fue asesinada a tiros en la parada de autobús de la colonia Fazaia, en Rawalpindi, cerca de la capital Islamabad.
El principal sospechoso del asesinato es un hombre identificado como Muhammad Shehzad, en compañía de su cómplice, conocido como Faizan, quien fue detenido tras el incidente.
Se informa que Faizan recogió a Sonia en una motocicleta y la llevó a conocer al Sr. Shehzad, quien luego se volvió contra la joven hasta dejarla sin vida.
Según informaciones de una organización benéfica, pocos días antes de su muerte, la señorita Bibi y su familia rechazaron la propuesta de matrimonio del musulmán e incluso se había negado a convertirse al Islam.
Ante el hecho, Neville Kyrke-Smith, director nacional de ACN (Reino Unido), expresó su conmoción por el asesinato.
Agregó, “El asesinato de Sonia demuestra el peligro de muerte que enfrentan las niñas y las jóvenes, especialmente las de origen cristiano y de otras minorías, en situaciones en las que se ven presionadas para casarse y abandonar su fe. Es urgente que se tomen medidas para garantizar la seguridad de estas jóvenes. Hacemos un llamado a las autoridades en Pakistán y a nuestro propio Gobierno para que actúen ahora. De lo contrario, solo habrá casos más trágicos como este”.
Por su parte, el activista de derechos humanos Sajid Christopher, de la Organización de Amigos Humanos, en Pakistán se refirió al hecho.
“El asesinato de Sonia Bibi es un acto terrible y horrible. Fue asesinada por rechazar la oferta de convertirse y casarse. Condeno enérgicamente este acto . Mi más sentido pésame para la familia de esta víctima inocente”, dijó.
La mujer asesinada era empleada de limpieza doméstica, ahora existe preocupación por el bienestar de su familia, de la que era la principal fuente de ingresos.
Bibi deja cuatro hermanos menores: tres hermanas y un hermano. El incidente se produce en medio de una creciente preocupación por la seguridad de las niñas cristianas e hindúes en Pakistán.