TURQUÍA.- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, visitará al Papa Francisco en el Vaticano, a principios del próximo mes. En la agenda, se prevén conversaciones sobre el reconocimiento norteamericano de Jerusalén como la capital de Israel y el futuro de la ciudad.
Tanto el líder turco, que preside la Organización para la Cooperación Islámica (OCI), como el jefe de la Iglesia Católica Romana, se opusieron a la decisión anunciada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a finales del año pasado.
Erdogan afirmó que la postura de EEUU sobre Jerusalén era una “bomba” que encendería el Oriente Medio y viene pidiendo el reconocimiento de Jerusalén como la capital de Palestina. Él dirigió la reunión de la OCI en Estambul , donde 57 países musulmanes han anunciado que van a luchar en la ONU por el anuncio de Palestina como un Estado independiente, con Jerusalén Oriental como capital.
El Vaticano ya reconoce a Palestina como una nación y el año pasado dio la bienvenida oficialmente a su embajada.
Un comunicado oficial en el sitio oficial del Vaticano, publicado en diciembre, dijo que el líder católico estaba siguiendo ” una serie de iniciativas, incluida la urgente reunión de la Liga Árabe y la Organización de Cooperación Islámica (OCI).
La Santa Sede está atenta a estas preocupaciones y recuerda las palabras más sinceras del Papa Francisco, reiterando su posición bien conocida en cuanto al carácter singular de la Ciudad Santa y la necesidad esencial de respetar el status quo, de acuerdo con las deliberaciones de la comunidad internacional” .
El viaje de Erdogan al Vaticano será el 5 de febrero, será la primera de un presidente turco desde 1959. Recientemente se ha divulgado que ambos hablaron por teléfono sobre sus “preocupaciones sobre el derecho de los israelíes sobre Jerusalén y acuerdan que el status quo debería mantenerse”.
El papa argentino ya estuvo con Erdogan durante su viaje a Turquía en noviembre de 2014. Desde el golpe fracasado, en julio de 2016, Erdogan viene tomando una serie de medidas que fortalezcan su poder en el país, incluyendo la prisión de líderes cristianos y la confiscación de propiedades de iglesias.
Francisco nunca se posicionó contrario a la represión religiosa en Turquía, pero alabó al país por sus “esfuerzos para recibir refugiados”. También llamó al gobierno turco de un “gran pacificador” de la región.
A finales del año pasado, una delegación de líderes de iglesias de Jerusalén tuvo un encuentro con el rey jordano Abdullah II, que es considerado por el Islam el “guardián” de los lugares sagrados. Entre ellos estaban obispos y sacerdotes católicos, que hablaban en nombre del Vaticano y censuraron los “intentos de judaizar” la capital de Israel. La declaración causó extrañeza, ya que no se produjo ningún cambio en la política de libertad religiosa del país.
[ Fuente: Israel National News ]