1 Juan 5:13 Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna
El apóstol Juan presenta once pruebas objetivas y subjetivas para la seguridad de la salvación.
Las epístolas del Nuevo Testamento están llenas con suficiente material de la seguridad para llenar volúmenes de comentarios. Sin embargo hay una pequeña epístola, 1Juan, que fue escrita exclusivamente para tratar con el asunto de la seguridad. El apóstol Juan declara su razón para escribir esta carta en nuestro verso de hoy “Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna” Juan no quería que sus lectores dudaran de su salvación, él quería que tuvieran una plena certeza de ella.
Ciertamente lo que Juan escribió en esta epístola no incomodará a creyentes genuinos, pero alarmará a cualquiera que tenga un falso sentido de seguridad. De hecho, dirigió esta carta a aquellos que han puesto su fe en Cristo, quien es la piedra angular de toda seguridad, “os he escrito a vosotros que creéis” No hay lugar para el auto-examen fuera de la fe en Cristo. Por eso todo lo que dice Juan sobre la seguridad se basa en la fe de Cristo y en las promesas de las Escrituras.
A lo largo de su epístola, Juan mantiene un balance delicado entre los terrenos objetivos y subjetivos de la seguridad. La evidencia objetiva conforma una prueba doctrinal mientras que la evidencia subjetiva proporciona una prueba moral. Juan va dentro y fuera entre los dos tipos de pruebas al presentar un total de once criterios que indicarán si uno posee la vida eterna. Al estudiar estas pruebas, te confirmarán si eres un creyente genuino, la realidad de tu salvación. Pero si te han dado una falsa seguridad sabrás en dónde estás y lo que necesitas hacer.
Por John MacArthur