BRASIL. – El crecimiento de los evangélicos ha generado una ampliación de la cultura musical y el surgimiento de artistas cristianos que no siempre cantan letras coherentes con el mensaje bíblico. En ese contexto, un pastor sugirió que tal vez fuera necesario que las iglesias miraran a las raíces de la música cristiana en busca de inspiración.
En un artículo publicado en su blog personal, el pastor Renato Vargens, líder de la Iglesia Cristiana de la Alianza, afirmó que es necesario evaluar con severidad las letras que los artistas cristianos graban, pues buena parte de las canciones actuales no añaden en nada a nuestra jornada de trabajo y que por eso los himnos tradicionales necesitarían volver a los cultos.
“Vivimos días complicados en que buena parte de los encuentros evangélicos son desprovistos de buena predicación, y claro, buena música. En verdad, me atrevo a decir que la mayoría de las canciones entonadas en nuestras reuniones, además de superficiales, son pobres melódicamente, como también sin profundidad teológica“, analizó el pastor.
Vargas también se preocupó en dejar claro que no se trata de un anhelo: “Permítame aclarar que no estoy en contra de las nuevas canciones.
Por el contrario, reconozco que muchas de ellas glorifican a Dios, y que en virtud de ello deben ser entonadas en nuestros cultos públicos“, contextualizó.
De esa reflexión, el pastor sacó “cinco razones fundamentales” que basan su sugerencia a las iglesias para “rescatar los viejos himnos entonándolos junto con nuevas canciones en sus cultos y reuniones”.
“Los viejos himnos poseen letras ricas, cuyo contenido exalta al Dios Trino; los viejos himnos no son antropocéntricos, sino que por el contrario se centra en Cristo y su maravillosa obra en la cruz; los viejos himnos tratan de las doctrinas fundamentales como salvación por la gracia mediante la fe en Cristo Jesús, justificación, remisión de pecados, vuelta de Cristo y mucho más “, enumeró.
Los dos últimos motivos presentados por Vargas destacan principios que deben ser comprendidos por todos los cristianos: “Los viejos himnos funcionan como un tipo de vacuna que nos ayuda a combatir las herejías de nuestro tiempo, el pragmatismo y los errores doctrinales diseminados por falsos maestros; los viejos himnos nos llevan a un entendimiento que el culto no es para gloria de hombres sino para la gloria de Dios “, concluyó.
