EE.UU.- En Estados Unidos, la disputa entre Dios y el Diablo puede llegar hasta las escuelas públicas. Los miembros del Templo Satanista norteamericano pretenden “ofrecer una alternativa a niños y padres” al ofrecer cursos para que los pequeños “aprendan y se diviertan” con el satanismo.
En 2001, la Corte Suprema estadounidense permitió que grupos religiosos ofrecieran disciplinas extracurriculares a alumnos de la red pública.
Esto dio a iglesias católicas y evangélicas una brecha para los llamados “Clubes de Buenas Noticias”, que trabajan para “evangelizar a los niños y las niñas con el Evangelio del Señor, para establecerlos como discípulos de la Palabra de Dios”.
Esta legislación se basa donde el Templo Satanista enfoca su esfuerzo. “Si los cursos religiosos son permitidos en las escuelas, queremos separar a nuestros clubes por toda la nación para garantizar que múltiples puntos de vista estén representados”, dijo Chalice Blythe, directora nacional del programa (“Satán después de la escuela”), Del Templo Satánico de Estados Unidos, a BBB Brasil.
Para convencer a los padres, ellos crearon un vídeo con audio invertido e imágenes alternas de niños y arañas, chivos con largos cuernos y otros símbolos de la religión.
Además, hay “El gran libro de actividades de los niños satanistas”, vendido por 10 dólares, en el que es posible encontrar ejercicios como “llame a los puntos para formar un pentagrama invertido”, una de las marcas más ligadas al culto de Satanás.
La oposición fue inmediata. Los grupos cristianos trataron como “sacrilegio” la idea. “Necesitamos frenar la popularidad del satanismo”, subrayó la TFP (Tradición, Familia y Propiedad) americana. John Eidsmoe, abogado constitucionalista, asegura que, primero, la Corte necesita decidir si el satanismo es una religión. “No puedo predecir cómo una Corte decidirá en relación a eso”, afirmó Eidsmoe al diario Christian Post.