RUSIA.- La selección de Croacia se disputó este miércoles, el 11 de julio, el partido semifinal de la Copa del Mundo con Inglaterra, venciendo a 2-1 sin embargo el técnico del equipo, Zlatko Dalic, habló sobre cómo la fe encaja como uno de los ingredientes de su metodología de trabajo, con éxito hasta aquí.
En el último partido, su equipo disputó prórroga y penaltis con los dueños de la casa, y se clasificó al derrotarlos por 4 × 3 en los cobros.
Durante la prórroga, el equipo croata llegó a estar delante de Rusia, pero sufrió el empate. En ese momento, Dalic cerró los ojos, respiró hondo y levantó la cabeza hacia el cielo, en una oración silenciosa.
“Mi primer juego y todo mi trabajo, especialmente la Copa del Mundo, se basó en la fe. En una cierta mentalidad. Ellos necesitan saber que pueden hacer eso y entonces tienen que hacerlo. Porque la calidad y la capacidad de nuestros jugadores nunca ha sido cuestionadas. Ahora, muchas cosas se unieron, mostramos fuerza mental y tuvimos un poco de suerte, pero la suerte favorece a los valientes, llegamos a las semifinales.
“Estamos entre los mejores equipos del mundo”, contó el técnico.
En otras entrevistas, Dalic compartió que siempre ora antes de cada partida, y agradece a Dios al final de cada juego, independientemente del resultado alcanzado si se equivoca a lo esperado.
La prensa internacional lo cuestionó, en la entrevista de la FIFA, sobre su comportamiento contenido, con un semblante impasible durante los partidos. Dalic explicó: “No puedo demostrar ansiedad, aunque haya una guerra dentro de mí. Si me muestro que estoy nervioso, voy a pasarlo a los jugadores. Pero cuando Rakitic marcó (el gol) en el penal, me solté y lloré espontáneamente. A veces, los hombres tienen que dejarlo pasar, también en el fútbol”, afirmó.
La espontaneidad relatada, sin embargo, es algo raro en sus expresiones, que no demuestran felicidad, temor o nerviosismo. Sobre el duelo con Inglaterra, Dalic no titubeó al decir que la enfrentaría con la misma convicción que lo llevó a la semifinal: “Ellos tienen muchos jugadores jóvenes con gran ritmo. Hay una sensación de euforia en Inglaterra de que ‘el fútbol está volviendo a casa’. Tenemos gran respeto por Inglaterra, pero no tenemos miedo de ellos”.
[ Fuente: Catholic News Agency ]