COLOMBIA. – Tres jugadores de fútbol, una azafata, un técnico de avión y un periodista han sobrevivido al accidente de avión en Colombia, en el que otras 75 personas perdieron la vida. Ximena Suárez, la azafata de la aerolínea Lamia, es boliviana y se congrega en una célula de una iglesia evangélica en Bolivia.
Ella es quien se encuentra en mejor estado de salud. Según los informes médicos, su posición en el momento del impacto “logró el milagro de la salvación”.
De hecho, ha sido trasladada desde urgencias a una cama del hospital.
Como puede leerse en su perfil de Facebook, son numerosos los mensajes de ánimo y reconociendo la mano de Dios en su supervivencia a la catástrofe aérea: “Tu vida es un milagro de Dios”, o “Mi niña hermosa Dios te ama, como tu familia y todos tus vecinos de dónde vives, Dios es grande Jimenita”.
Alan Ruschel y su esposa Amanda. También dos de los tres jugadores de fútbol del Chapecoense que fueron rescatados con vida pertenecen a la fe cristiana evangélica. “La situación es complicada, difícil. Sólo Dios puede dar fuerzas ahora. Gracias por tu ayuda Señor”, escribió Amanda, la esposa de Alan Ruschel en Instagram poco después de que se confirmase que el jugador de fútbol del Chapecoense había sobrevivido y le habían llevado a un hospital, donde se mantenía estable.
“Estamos orando para todos los que aún no han sido rescatados, y por fortaleza para toda la familia “, agregó.
NETO HABLABA DE SU FE HORAS ANTES DEL ACCIDENTE, uno de los seis supervivientes, él es cristiano. Pocas horas después del accidente, se supo que el jugador Helio Hermito Neto había sido encontrado con vida y llevado a un hospital, aunque su estado de salud es delicado.
Según JM Noticia, Neto es cristiano evangélico. En una entrevista pocas horas antes del accidente de avión, Neto habló sobre el cuidado de Dios en el proceso de recuperación de una lesión: “Tuve una lesión grave; y no esperaba que evolucionase tan bien como ha ido. Fue una situación que sé que Dios permitió en mi vida “.
El tercer jugador de fútbol que sobrevivió es Jackson Follman. En lo que respecta al estado de los tres futbolistas, el diario brasileño Globo informa de que Follman, de 24 años, ha sufrido la amputación de una de sus piernas y que Ruschel, de 27, tiene una lesión en la espina dorsal además de múltiples fracturas en brazos y piernas. No hay información detallada sobre el estado de salud de Neto.
Cientos de seguidores del equipo de Brasil se reunieron en su estadio para expresar su apoyo a las familias y los heridos. El equipo fue fundado en 1973 en Chapecó (estado de Santa Catarina). Brasil ha declarado tres días de luto.
El aparato, un Avro Regional Jet 85, fletado por la aerolínea boliviana Lamia y que llevaba 77 personas a bordo, “se declaró en emergencia” anoche a las 22.00 hora local (03.00 GMT del martes) “por fallas eléctricas” cuando se aproximaba al Aeropuerto Internacional José María Córdova de Medellín, en el noroeste de Colombia, sede del Atlético Nacional, el que este miércoles debía ser su rival.
Menos de dos horas después, la Aeronáutica Civil (Aerocivil) confirmaba el accidente sufrido por el avión en las faldas del Cerro Gordo, entre las localidades de La Unión y La Ceja, en el departamento de Antioquia, y a solo 17 kilómetros en línea recta de Rionegro, localidad donde está situado el aeropuerto de Medellín.
Junto con el análisis de las cajas negras, el testimonio de los 6 supervivientes -especialmente los 2 miembros de la tripulación- será fundamental para entender qué pudo pasar. Sin embargo, se empiezan ya a apuntar algunas posibilidades. La única hipótesis que parece descartada por las autoridades es que el mal tiempo esté detrás de la catástrofe.
En su primer comunicado emitido esta madrugada, el aeropuerto José María Córdova de Medellín informaba de “fallas eléctricas” que pueden haber causado una emergencia en la maniobra de aproximación.
Una de las causas que cobra más fuerza es que el aparato siniestrado se hubiese quedado sin combustible. Expertos en aeronáuticas explican que la aeronave accidentada se destina a vuelos cortos, por lo que no se explican que en este caso realizace un trayecto de 4 horas para cubrir una distancia de 2.265 kilómetros, casi la misma distancia que tienen de autonomía máxima estos aparatos.
Fuente: Protestante Digital y Levante