//Un hombre bajito era Zaqueo un hombre bajito así… Se subió a un árbol para ver a Cristo que pasaba por allí Cuando cristo vino cerca de el, mirando arriba así… Le dijo: zaqueo, bájate, apúrate Por que voy a tu casa contigo//
Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto mu
Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.