Lucas 12:31 Busquen ustedes el reino de Dios, y todas estas cosas les serán añadidas.
Hay gente que, si pudiera, seguramente pediría explicaciones a Dios sobre por qué se enfermó, por qué hay tanta maldad, tanta hambre, tanto dolor e injusticia en el mundo. Y además de pedir explicaciones, ciertamente también le diría a Dios como debería actuar para que el mundo sea un lugar mejor para vivir.
La Biblia nos dice con claridad que Dios, por un acto de amor, envió a su hijo Jesús al mundo para que, por medio de su sacrificio y muerte, fuera pagada nuestra deuda de pecados y pudiéramos ser salvos de la condenación eterna.
La Biblia también nos dice que esta salvación es tuya y mía cuando creemos que Jesús es nuestro único Salvador. Sin embargo, ya salvados, no somos llevados inmediatamente a la vida feliz en el cielo, sino que seguimos en este mundo sujetos al sufrimiento. Liberación total, para siempre, tendremos solamente después de la segunda venida de Cristo. Por lo tanto, por más que no siempre comprendamos las decisiones de Dios, debemos aceptarlas con humildad.
ORACIÓN: Padre nuestro, ayúdame a no cuestionar tus decisiones, sino a aceptarlas por fe. Amén.