En Los Estados Unidos, se reporta que hay ochocientas o más sociedades secretas diferentes. Multitudes de personas de la mayor influencia son miembros de aquellas órdenes secretas. La membresía incluye huestes de miembros de iglesias y muchos predicadores. Una gran cantidad de hombres que yo conozco y amo, incluyendo miembros de mi propia familia, son miembros de las logias.
Cuando se trata el asunto de la sociedad secreta, a menudo se hace la pregunta: "¿Son religiones la Francmasonería y las otras órdenes secretas?" El masón promedio responderá, "No." Un masón mal informado una vez escribió: "La logia y la iglesia ocupan dos esferas totalmente diferentes, y las cosas que no son semejantes, no pueden ser comparadas. La iglesia es del Señor de los cielos, la logia es de origen humano. La iglesia ministra ante todo a las almas, la logia al cuerpo" (The Discerner, Vol. V-N° 1, enero de 1965). Estaría bien si esta declaración fuese verdad, pero es completamente errónea. Si la logia fuera sencillamente una organización fraternal que buscara el beneficio de sus miembros y limitara sus actividades a las áreas de la vida no religiosas, entonces el tema podría ser visto de una manera totalmente diferente. Aunque todavía habría muchas objeciones a la logia, si ésta omitiera la religión, la oposición encontraría una línea diferente de argumentos.
Los hombres siempre han formado clubes y grupos sociales. Hay muchas organizaciones cívicas bien formadas (tales como Rotary, Leones, Kiwanis, etc.) que son apropiadas en sí mismas. Un cristiano fiel puede ser miembro de cualquiera de estos clubes por razones cívicas, pero en cuanto al grupo de sociedades secretas, la participación de los cristianos en la mayoría de ellas se clasificaría como pecaminosa.
Las logias reclaman ser centros de la moralidad, declaran dar gran luz acerca de las cosas espirituales, afirman hacerle al hombre un mejor ciudadano; y muchos reclaman que son de grande ayuda para el cristianismo. Las logias mismas a menudo profesan mostrar el camino al cielo. Ellos hablan mucho acerca de Dios, tienen Biblias en la logia en muchos países, y llaman a sus edificios "templos".
El propósito de este artículo es presentar los hechos que comprueban que la masonería verdaderamente tiene un aspecto religioso. El vocero de la mayor autoridad de la logia señala una y otra vez que la logia tiene una base religiosa. Las palabras de Pablo a los atenienses son muy apropiadas cuando son aplicadas a la logia masónica, "... en todas las cosas yo percibo que ustedes son muy religiosos" (Hechos 17:22).
Obra no secreta
La atracción de la masonería es lo secreto de la orden. Los secretos han de ser guardados de toda la gente, aun de sus esposas. El masón puede decirle a su esposa algunas cosas acerca de las fechas de sus reuniones, un picnic o una fiesta, pero no se le permite contarle acerca del "trabajo" de la masonería. Parece que algunas personas piensan que, por ser la logia una orden secreta, sus enseñanzas no son conocidas. Algunos han argumentado que es imposible conocer algo acerca de la masonería sin ser miembro. Este es un concepto errado. Yo sé exactamente lo que es la logia y su propósito. Esto puede ser conocido por cualquiera que esté dispuesto a inquirir.
Los masones se han sido enseñado que ninguna obra secreta está impresa. Según ellos, nada está escrito. Les han contado que la única manera en que alguien pueda tener conocimiento de la obra secreta de la masonería, es que otro masón le cuente algo al respecto, y que la única manera en que otro masón le cuente algo a otro es que este otro venga a ser masón. Yo tengo más de 40 libros en mis estantes que tratan de la masonería. Incluido en estos libros están los monitores oficiales para los estados de Kentucky, Tennessee, Illinois, e Indiana; 2 juegos de laEncyclopedia de Freemasonry, por Albert Mackey, un masón del grado 32; Morals and Dogma por Albert Pike (esta obra fue preparada para el Concilio Supremo del grado 32, para la Jurisdicción del Sur de Estados Unidos, y publicada por su autor); y Duncan"s Masonic Ritual and Monitor. Algunos amigos masones han quedado aturdidos al ver que yo tengo esos libros. Se sorprenden al ver que estos libros contienen el "trabajo secreto", palabra por palabra, paso por paso.
¿Recuerdan ustedes, amigos masones, cuando estuvieron sentados en el auto, ya muy tarde en la noche, con algún Maestro Masón enseñándoles estas cosas, y enfatizando que todo esto es muy secreto y que no está impreso? Todo esto estaba impreso entonces, y todavía lo está. No permita jamás que alguien le diga que la única manera de aprender los secretos de la masonería es por medio de ser miembro de la logia, porque ¡eso no es así!
En este artículo, no me encargo de hablar por la masonería; más bien, la masonería hablará por sí misma. Por medio de sus propias declaraciones, sus propias palabras, la masonería debe encontrarse justificada o condenada.
El “dios” de la masonería.
Para llegar a ser masón, uno debe creer en la existencia de un ser supremo. The Tennessee Craftsman dice: "La fundación sobre la que la masonería se apoya es la creencia en un Ser Supremo, y la confesión de él" (p. 7). Albert Mackey dijo: "La creencia en la existencia de Dios es un punto esencial de la masonería especulativa; en realidad, es tan esencial que uno de los puntos principales de la Orden es que ningún ateo puede ser hecho masón” (Encyclopedia of Freemasonry, Vol. I, página 301).
¡Ningún ateo puede llegar a ser masón! Pero, ¿quién es el ateo? Albert Pike argumenta que la "verdadera controversia es que si existen las Cualidades que llamamos Dios, y que no tiene que ver con el nombre en particular por el cual designamos las Cualidades. El nombre es de la menor consecuencia. El verdadero ateísmo es la negación de la existencia de cualquier Dios, de la realidad de cualquier concepto posible de Dios" (Morals and Dogma, p. 644 ).
La masonería llama a su dios el (G.A.O.T.U. - Great Architect of the Universe, el Gran Arquitecto del Universo). Para ser masón no es necesario creer en el Santo Dios de la Biblia; el masón sólo tiene que creer en "un dios". La razón para esto es que la masonería es una religión universal y tiene miembros entre aquellos que creen en dioses paganos. Pike dice, "La masonería no propaga ningún credo, excepto el suyo propio, el más simple y sublime, a saber, aquella religión universal, enseñada por la Naturaleza y la Razón. Sus logias ni son judías, musulmanes, ni cristianas. La masonería reitera los preceptos de moralidad de todas las religiones" (Morals and Dogma , p. 718).
Suponga que un budista está orando en una logia masónica (pues los masones permiten que los budistas sean miembros de su logia) y ora, "Gran Arquitecto del Universo," ¿a quién piensa usted que él tendría en mente? El no está dirigiendo su oración a Jehová, porque su fe está en Buda.
Una falsa religión
Algunos tratan de argumentar que la masonería es solamente una institución social; otro dice que es una compañía de seguros; y aun otro dice que es una organización benévola; y un cuarto afirma que es una religión. Si se comprobara que la respuesta correcta a esta pregunta es que la masonería es una religión, entonces surgiría la pregunta, “Cuál es la religión de la masonería?” Si es cualquier religión aparte de la religión de Cristo, ineludiblemente sería falsa, porque la religión de Cristo es la única religión verdadera. Y, en tal caso, ningún cristiano podría tener comunión con la masonería.
La evidencia continúa siendo abrumadora, que la masonería es una religión. No cabe ninguna duda razonable en cuanto a si la masonería es una institución religiosa. La logia promete un nuevo nacimiento, tiene su propio redentor, y promete la gran Logia Celestial. No solamente los símbolos, ritos, templos, altares, canciones y oraciones apuntan inequívocamente a ésta como una religión, sino que también una gran cantidad de autores masónicos enfáticamente declaran que es precisamente una religión.
Durante la ceremonia de iniciación a la logia, enseñan al Socio Aprendiz a invocar "Las bendiciones de la Deidad ... porque la masonería es una institución religiosa ..." (Kentucky Monitor, p. 28).
Bajo el encabezado, "La religión de la masonería," Albert Mackey critica a algunos a quienes él llama "hermanos más tímidos," quienes niegan que la masonería es una religión. El replica, "Al contrario, yo afirmo, sin demora alguna, que la masonería es, en todo sentido de la palabra, excepto uno, y esto en su sentido menos filosófico, una institución eminentemente religiosa, que está adeudada únicamente al elemento religioso que ésta contiene desde su origen, y para su existencia continua, y que sin este elemento religioso, apenas sería digna de la cultivación por los sabios y buenos" ( Encyclopedia of Freemasonry, Vol. 2, p. 618 ).
Mackey continúa diciendo, "Consideren sus cualidades prominentes, sus ceremonias sublimes, sus profundos símbolos y alegorías, todos inculcando doctrina religiosa, mandando la observancia religiosa, y enseñando verdades religiosas, y ¿quién puede negar que ésta es eminentemente una institución religiosa?" (Ibid). El autor concluye la sección sobre la religión diciendo: “La masonería, es, pues, verdaderamente, una institución religiosa; y en base a esto principalmente, si no solamente, el masón religioso debería defenderla". (Ibid, p. 619).
Esto debería resolver para siempre la controversia acerca de si la masonería es o no es religiosa. De acuerdo a sus propias afirmaciones, es correcto hablar de la "religión de la Francmasonería." El que contiende que la Logia Masónica no es una institución religiosa o es ignorante de la organización o, de otro modo, ¡es un deliberado engañador! La masonería es religiosa y enseña religión.
Hay solamente una religión verdadera. Esa religión es el cristianismo. Todas las otras religiones son falsas. No es necesario que yo defienda esta proposición, pues ningún cristiano jamás lo ha negado. Ahora estamos en una posición donde podemos determinar absolutamente si la religión de la masonería es falsa o verdadera. Volvamos a los escritos de los masones para ver qué es lo que tienen que decir sobre el asunto: "Pero la religión de la masonería no es sectaria, pues admite en su seno hospitalario a los hombres de todos los credos, no rechazando ni aceptando a nadie por causa de su fe en particular. No es el judaísmo, aunque nada hay en ésta para ofender a un judío; no es el cristianismo, pero no hay nada en ésta que sea repugnante a la fe de un cristiano". (Ibid, énfasis mío, bb).
¡Estas no son las palabras mías! Son las palabras de la propia enciclopedia de la Masonería, preparada por uno de los más grandes autores masónicos. Esta declara que la masonería tiene una religión, y que esa religión no es el cristianismo. Usemos un poco la lógica: Si la religión de la masonería no es el cristianismo, entonces ¡es religión falsa! Si la religión de la masonería es falsa, entonces ¡no es de Dios! Si la religión de la masonería no es de Dios, entonces ¡es del diablo! ¡Déjela, pues, y arrepiéntase!