Personas que nunca han escuchado el mensaje del Evangelio están siendo alcanzadas por misioneros de World Missionary Press en Liberia, esto a pesar de los riesgos y amenazas.
La misionera de World Missionary Press, Helen Williams, informó que un grupo, que no puede ser identificado por razones de seguridad, llevó las Buenas Nuevas a tribus africanas no alcanzadas. "Su objetivo es ir donde el Evangelio aún no está presente", dijo Williams.
Los misioneros dicen que la opresión espiritual es común en los pueblos no alcanzados. “Estas son áreas donde hay una fuerte presencia demoníaca. Las aldeas están dirigidas por líderes espirituales que son expertos en rituales satánicos”, dice Williams.
Según los cristianos locales, había una ciudad que era "inaccesible". Se informó a los misioneros que no tendrían que preocuparse por ir allí, ya que "sería imposible iniciar una iglesia allí" debido a que los líderes tribales eran chamanes satánicos. El grupo tardó algunos años, pero "hoy ayudaron a iniciar iglesias en esa región y ya están construyendo edificios para iglesias".
Aquel era un pueblo considerado "la fortaleza más poderosa de Satanás en Liberia", recuerda Williams. “Mientras iba de casa en casa, vinieron tres hombres y se quedaron detrás de mí como sombras todo el tiempo que estuve allí'”, dice. Los hombres no dañaron a los misioneros, sino que les brindaron ayuda y protección. "Más tarde se enteró de que uno de ellos soñó que un hombre blanco vendría con algún material bíblico y que debería seguirlo", dijo Williams. Después de estudiar la Palabra de Dios con el misionero, los tres hombres se bautizaron.
“Dos de ellos son ahora pastores de iglesias en esa región. El tercer hombre trabaja con ellos. Necesitamos oración para saber qué imprimir y llevar al campo misionero. África occidental tiene 393 tribus no alcanzadas de 147 millones de personas, por lo que las oportunidades son excelentes. Ore para que Dios proteja a estos equipos que se dirigen a regiones controladas por el enemigo. Esta es una guerra espiritual”, concluye.
*Noticia extraída de Impactoevangelistico.net
