Después de bombardear y saquear varias iglesias en Chin, un estado mayoritariamente cristiano en Myanmar , el ejército birmano plantó minas terrestres para evitar que la gente regresara a templos.
Según el diario The Chindwin, una fuente local, que permaneció en el anonimato por razones de seguridad, informó que el 11 de diciembre tropas militares destruyeron cuatro iglesias y plantaron minas en complejos de templos en el sur de Chin.
Según la fuente, los edificios sufrieron graves daños y se colocaron minas en las cercanías de la Iglesia Católica Romana y la Iglesia del Evangelio, impidiendo el acceso a los sitios.
Entre las 18 iglesias de la ciudad, la fuente confirmó que cuatro iglesias tenían todas sus propiedades saqueadas y llevadas al campamento base del ejército birmano y agregó: “No solo en nuestras iglesias, se han colocado bombas frente a nuestras casas y ahora en todas partes de la ciudad».
El residente local también dijo que los soldados también saqueaban casas y amenazaban con quemarlas si los residentes no regresaban a la ciudad. Según The Chindwin, casi toda la población, de casi 11.000, está abandonando la ciudad y buscando refugio en las aldeas cercanas.
Mientras se concentran en salvar sus vidas, los aldeanos luchan por pagar el alquiler y la comida, y necesitan ayuda humanitaria.
Desde que el ejército tomó el poder en febrero de este año, han aumentado los ataques contra cristianos, que representan alrededor del 6% de la población mayoritaria budista. La represión en curso ha dejado a las minorías étnicas religiosas en Chin y otros estados aún más vulnerables.
En junio, los líderes de la iglesia en el estado oriental de Karenni informaron de ataques militares contra al menos ocho iglesias. En septiembre, una iglesia bautista en el estado de Chin fue alcanzada por fuego de artillería militar en un intento de contener la resistencia en el país.
Durante el ataque, finalmente le dispararon a un pastor bautista. Estaba ayudando a apagar el fuego en una de las casas, según informó International Christian Concern (ICC).
El ataque de los militares a iglesias, propiedades y viviendas de civiles es un insulto a la religión y a los creyentes”, dijo la Convención Bautista Chin en un comunicado el 19 de septiembre.
*Noticia extraída de Noticiacristiana.com
