A raíz de la reunificación de las potencias musulmanes tras el fracaso de la segunda cruzada, Saladino, gobernante del Estado islámico, extendió sus tropas desde el desierto de Libia hasta el valle del Tigris, rodeando los estados de los cruzados e invadiendo Jerusalén sobre el año 1187.
Los Caballeros Templarios y los Caballeros Hospitalarios de San Juan de Jerusalén fueron degollados. Saladino se apoderó de la mayor parte de las fortalezas de los cruzados. Ante tal catastrófica situación, el Papa Gregorio VIII proclamó entonces la Tercera Cruzada a la que se unieron tres grandes monarcas, entre ellos, Ricardo Corazón de León.
En ese momento, la única gran ciudad que poseían los cruzados era Tiro, en el Líbano. Pero los reyes y los seguidores constituyeron la fuerza más grande que había tenido lugar desde 1095.
1.- Las Cruzadas: La Primera Cruzada (I)
2.- Las Cruzadas: La Primera Cruzada (II)
3.- Las Cruzadas: Segunda y Tercera Cruzadas (I)
4.- Las Cruzadas: Segunda y Tercera Cruzadas (II)