Los libros de Charles Haddon Spurgeon se siguen imprimiendo y vendiendo hoy como si el predicador del siglo XIX estuviera vivo. La pregunta que nos surge entonces es: ¿qué tenía este orador victoriano inglés que le permite hoy seguir cautivando mentes y corazones?
En un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.